Estrategias para optimizar la profesión de enfermería como socio clave para mejorar la atención primaria en todo el hemisferio

Hace años que la Organización Mundial de la Salud (OMS) viene solicitando mejorar la atención primaria de salud para resolver las necesidades de los pacientes e incrementar el número de profesionales de salud calificados para brindar dicha atención (Lawn, et al., 2008). Las enfermeras prestan el 90 por ciento de todos los servicios de salud en el mundo y constituyen más del 80 por ciento del personal sanitario mundial (Benton, 2015; Davis, 2017). En América Latina y el Caribe (ALC), la atención primaria de salud es muy necesaria, especialmente en las zonas rurales y desatendidas (OPS, 2014). La campaña Nursing Now se basa en el Informe de Triple Impacto, según el cual, además de mejorar la salud en todo el mundo, el empoderamiento de las enfermeras mejorará la igualdad de género (dado que la gran mayoría de las enfermeras siguen siendo mujeres) y apoyará el fortalecimiento de las economías (Grupo Parlamentario de Todos los Partidos sobre Salud Global, 2016; CIE, 2018).^(1-14)

La Organización Panamericana de la Salud (OPS), en una declaración de 2013, hizo un llamado a las enfermeras con capacitación avanzada para conseguir satisfacer tales necesidades de atención primaria de salud (OPS, 2013) y más recientemente reiteró dicho enfoque en una nueva publicación, Expandiendo las funciones de las enfermeras en la atención primaria de salud (OPS, 2018). Estas enfermeras deben ser educadas, y las escuelas de enfermería deben comenzar a capacitarlas en estas funciones avanzadas. Uno debe preguntarse, ¿qué barrera impide educar a las enfermeras para satisfacer estas necesidades en LAC? Zug, Cassiani, Pulcini y otros (2016) encuestaron a informantes clave en ALC y concluyeron en que el rol de la EPA acaba de comenzar o aún no se ha implementado o comprendido bien en América Latina. Mientras muchos conocen los roles de Enfermería de Práctica Avanzada, otros poseen menores conocimientos y se beneficiarían con más información y estrategias de promoción. Bryant-Lukosius ha sugerido estrategias para implementar el papel de la APN en el marco de la PEPPA. (Oldenburger, Cassiani, Bryant-Lukosius, et al, 2017).^(5,7,14)

En América Latina, las enfermeras de diversas áreas reciben aún bajos salarios y, en consecuencia, un bajo estatus comparadas con otros profesionales de la salud, como los médicos. Las carreras médicas son muy solicitadas, muchas mujeres jóvenes suelen este campo por sobre la enfermería. Otro problema es la relativa falta de estatus para roles clínicos versus roles administrativos. Las instancias clínicas son normales, por lo que una enfermera que recibe más educación, probablemente se dedique a la administración o la enseñanza en lugar de a la práctica clínica avanzada. Los médicos tienden a dominar las profesiones de salud, por lo que las enfermeras no gozan del mismo estatus. Aunque las funciones administrativas y la enseñanza proporcionan una base importante para mejorar la práctica de enfermería, también es necesario valorar la práctica clínica para elevar el estatus de la profesión.

En los EE.UU., las universidades y otras instituciones académicas han enfrentado un desafío similar y creciente para brindar atención primaria a pacientes de áreas rurales y desatendidas (Bodenhemer & Bauer, 2016). Pero en Estados Unidos, parte de la solución está en aumentar el número de Enfermeras de Práctica Avanzada (APN, por sus siglas en inglés) altamente calificadas para satisfacer las complejas necesidades de atención primaria de salud de diversas poblaciones. Además, muchas instituciones de educación superior han respondido a la creciente necesidad de pasar de la educación en enfermería especializada de base hospitalaria a la preparación del personal para desempeñar funciones de enfermería de atención primaria (Macy Foundation, 2016). Estos cambios exigen que los programas de educación de enfermería amplíen sus planes de estudio e incorporen enfoques educativos innovadores para facilitar el aprendizaje a través de la experiencia, desarrollar habilidades y mejorar los conocimientos para la práctica básica y avanzada de la enfermería en el contexto de una comunidad global.^(9,10)

Con el paso de los años, desde que se presentaron las funciones de la APN en Estados Unidos, el estatus de las enfermeras en todos los niveles ha aumentado, al igual que los salarios del sector. La enfermería ha sido la profesión en la que más se ha confiado durante muchos años en EE.UU. Muchos hombres y mujeres jóvenes eligen la enfermería por sobre la medicina, reconociendo el valor de la profesión. Si bien existen escalas clínicas, cada vez más enfermeras optan por permanecer junto a los lechos o en prácticas de atención primaria con más educación, en vez de optar por funciones administrativas más altas. La escasez de personal docente en las instituciones educativas formadoras de enfermeras es bien conocida (AACN, 2017) y los salarios docentes tienden a ser inferiores que los de los médicos altamente calificados en hospitales y atención primaria. El Informe de la OIM publicado en 2011, El futuro de la enfermería: Liderar el cambio, promover la salud, llamó a un aumento del nivel educativo de todas las enfermeras en Estados Unidos, desde las auxiliares a las doctoradas, así como un mayor alcance para su práctica.^(6,10)

Una solución para mejorar la enfermería clínica en América Latina es aumentar el intercambio de información en el hemisferio. Actualmente, existe un interés sin precedentes en las Alianzas Académicas Globales, en las que las escuelas de enfermería de Estados Unidos están creando vínculos institucionales con universidades y hospitales de enseñanza afiliados en el extranjero. Estas alianzas académicas internacionales ofrecen oportunidades únicas para que los estudiantes se relacionen con sus compañeros, profesionales de salud, expertos y ciudadanos locales en entornos de aprendizaje compartidos, práctica clínica basada en la evidencia e investigación. Los estudiantes y el cuerpo docente se benefician mutuamente de la experiencia, los recursos y la colaboración compartidos con educadores y líderes de enfermería internacionales, que promueven la práctica de la enfermería en todo el mundo.

El concepto de alianza institucional de colaboración no es nuevo. Muchos colegios y universidades pueden carecer de recursos y experiencia para lograr “alcance global” y, consecuentemente, tratar de establecer vínculos con instituciones extranjeras. Las asociaciones entre el sector público y el privado (APP) son otro ejemplo en el que las instituciones de educación superior de los países ricos se han asociado con instituciones de países de ingresos bajos y medios de diversas partes del mundo.

Dada la importancia de abordar las necesidades insatisfechas en la atención primaria, el profesorado y los programas de enfermería deben examinar cómo pueden aprovechar específicamente las alianzas académicas de colaboración con instituciones extranjeras para priorizar la educación avanzada en enfermería en el contexto de una comunidad global. Es necesario un marco para el desarrollo de alianzas internacionales sostenibles con objetivos, metas y efectos mensurables y definidos.

Otra estrategia es asociarse con líderes políticos y de enfermería claves para comenzar a implementar la campaña Nursing Now en LAC. Involucrar a socios clave externos a la enfermería, como los Ministerios de Salud y Educación, así como a líderes políticos para abogar por esta valiosa profesión, puede igualar el éxito que tuvo el informe Future of Nursing (“El futuro de la enfermería”) en Estados Unidos. La Organización Panamericana de la Salud (OPS) ha comenzado este trabajo con su declaración de 2013 y ha reunido a enfermeras y otros profesionales de todo el continente para resolver los problemas de atención primaria en América Latina y el Caribe (OPS, 2013). Las partes interesadas de todo el continente pueden movilizarse para hacer avanzar la profesión de manera dinámica. Las enfermeras son una parte clave de la solución para resolver las necesidades de atención primaria de salud de las poblaciones. Su poder e influencia deben ser liberados para que el talento en enfermería pueda aplicarse al máximo en toda América Latina y el Caribe.⁽¹²⁾

Referências

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  Larson T, editor. Registered Nurses: Partners in transforming primary care. Recommendations from the Macy Foundation Conference on Preparing Registered Nurses for Enhanced Roles in Primary Care, Atlanta, Georgia: Josiah Macy Jr. Foundation; 2016. [Proceedings of a Conference on Preparing Registered Nurses for Enhanced Roles in Primary Care].
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Fechas de Publicación

• Publicación en esta colección
  May-Jun 2018