Este estudio transversal con 577 trabajadores investigó la asociación entre aptitud física autopercibida y trastornos musculoesqueléticos en cuello, hombro o parte alta de la espalda, en trabajadores de 14 industrias de plástico, en Salvador, Bahía, Brasil. La aptitud física fue evaluada en una escala de 0 a 5 puntos. Los casos de disturbios musculoesqueléticos: dolor en los últimos 12 meses, duración de más de una semana o incidencia mensual con restricción al trabajo o buscar asistencia médica, o gravedad 3 o mayor, en escala de 0 a 5. La regresión logística investigó la interacción entre aptitud física y demanda física en el trabajo para la aparición de trastornos musculoesqueléticos. La precaria aptitud física evidenció en 3,19 veces la posibilidad de trastornos musculoesqueléticos, pero sólo entre aquellos sometidos a una baja demanda física. Entre los expuestos a una alta demanda física, una buena aptitud física no fue un factor de protección para los trastornos musculoesqueléticos, o sea, el trabajo físico pesado se asocia con una alta prevalencia de trastornos musculoesqueléticos, aún cuando trabajadores refieren una buena aptitud física. Programas de actividad física no deben sustituir intervenciones en las condiciones de trabajo.
Enfermedades Musculoesqueléticas; Trastornos de Traumas Acumulados; Esfuerzo Físico