En este artículo se discute la importancia de la habilidad de la atención conjunta y sus representaciones en la cognición social y en la adquisición del lenguaje. Plantease precisamente la idea de que en el primer año de vida los niños construyen, a través de actividades compartidas y de la inserción en la cultura, una forma de comunicación intencional, basada en los primeros cambios intersubjetivos establecidos con los adultos. Los debates en torno de esa temática recaen en distintos planteamientos acerca de cuál sería el punto evolutivo en el cual el niño se tornaría capaz de establecer periodos de atención conjunta, y en que momento esta habilidad estaría consolidada. Resaltase la necesidad de estudios que investiguen la atención conjunta en el primero año de vida, objetivando una mayor comprensión de esa habilidad y sus implicaciones en el desarrollo comunicativo y del lenguaje.
Interacción madre-niño; atención conjunta; cognición social