Los libros de lectura usados en la educación primaria argentina fueron un instrumento muy importante para la transmisión de las ideas de modernización y "civilización" de la sociedad. Fueron un apoyo fundamental en la difusión de los valores morales, estéticos y patrióticos, aunque no fueron militaristas y tendieron a moderar la inclusión de preceptos higienistas, a medida que la población los fue asimilando. La consolidación de las pedagogías espiritualistas, con elementos de la Escuela Nueva, se advierte también en los contenidos de estos libros, que pusieron el énfasis en el autocontrol del escolar, apelando a la persuasión y a los sentimientos de emulación y de culpa. Escritos para niños urbanos, no fueron funcionales para el medio rural, aunque contribuyeron a una temprana urbanización de la mentalidad agraria.
Manuales escolares; Pedagogías espiritualistas; Mentalidad agraria