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Analgesia regional en cuidados intensivos

Resúmenes

JUSTIFICATIVA Y OBJETIVOS: La analgesia regional desempeña un rol importante en el abordaje multimodal del dolor en el enfermo crítico y permite amenizar la incomodidad del enfermo y reducir los estréses fisiológico y psicológico asociados. Al disminuir las dosis de opioides sistémicos, se reducen algunos de sus efectos colaterales, como el síndrome de abstinencia, posibles alteraciones psicológicas y disfunción gastrointestinal. A pesar de esos beneficios, su uso es controversial, pues los enfermos en unidades de cuidados intensivos tienen a menudo contraindicaciones, como la coagulopatía, la inestabilidad hemodinámica y la dificultad en la evaluación neurológica y en la ejecución de la técnica regional. CONTENIDO: Los autores presentan aquí una revisión sobre la analgesia regional en cuidados intensivos, concentrándose en las principales ventajas y limitaciones de su uso en el enfermo crítico, y describen las técnicas regionales más usadas y su aplicabilidad en ese contexto.

ANALGESIA; DOLOR; CUIDADOS INTENSIVOS; COMPLICACIONES, Generalidad; TÉCNICAS ANESTÉSICAS, Regional


JUSTIFICATIVAS E OBJETIVOS: A analgesia regional desempenha um papel importante na abordagem multimodal da dor no doente crítico e permite amenizar o desconforto do doente e reduzir os estresses fisiológico e psicológico associados. Ao diminuir as doses de opioides sistêmicos, reduz alguns dos seus efeitos colaterais, como a síndrome de abstinência, possíveis alterações psicológicas e disfunção gastrintestinal. Apesar desses benefícios, seu uso é controverso, uma vez que os doentes em unidades de cuidados intensivos apresentam frequentemente contraindicações, como coagulopatia, instabilidade hemodinâmica e dificuldade na avaliação neurológica e na execução da técnica regional. CONTEÚDO: Os autores apresentam uma revisão sobre analgesia regional em cuidados intensivos, com foco nas principais vantagens e limitações de seu uso no doente crítico, e descrevem as técnicas regionais mais usadas e a sua aplicabilidade nesse contexto.

ANALGESIA; COMPLICAÇÕES, Generalidades; DOR; TÉCNICAS ANESTÉSICAS, Regional; TERAPIA INTENSIVA


JUSTIFICATIONS AND OBJECTIVES: regional analgesia plays an important role in multimodal pain management in critically ill patients, minimizing patient discomfort and reducing the associated physiological and psychological stress. Lower doses of systemic opioids reduce some of its side effects, such as withdrawal syndrome, possible psychological changes, and gastrointestinal dysfunction. Despite these benefits, its use is controversial, as patients in intensive care units often have contraindications, such as coagulopathy, hemodynamic instability, and difficulty in neurological assessment and implementation of regional technique. CONTENT: The authors present a review of regional analgesia in intensive care, focusing on the main advantages and limitations of its use in critically ill patients, and describe the most commonly used regional techniques and its applicability.

Analgesia; Anesthesia; Conduction; Pain; Intensive Care


ARTÍCULO DE REVISIÓN

IServicio de Anestesiología, Hospital de São João, Entidad Pública Empresarial (EPE), Porto, Portugal

IIUnidad de Cuidados Intensivos Polivalente Geral, Hospital de São João, EPE, Porto, Portugal

Correspondencia para

RESUMEN

JUSTIFICATIVA Y OBJETIVOS: La analgesia regional desempeña un rol importante en el abordaje multimodal del dolor en el enfermo crítico y permite amenizar la incomodidad del enfermo y reducir estrés fisiológico y psicológico asociados. Al disminuir las dosis de opioides sistémicos, se reducen algunos de sus efectos colaterales, como el síndrome de abstinencia, posibles alteraciones psicológicas y disfunción gastrointestinal. A pesar de esos beneficios, su uso es controversial, pues los enfermos en unidades de cuidados intensivos tienen a menudo contraindicaciones, como la coagulopatía, la inestabilidad hemodinámica y la dificultad en la evaluación neurológica y en la ejecución de la técnica regional.

CONTENIDO: Los autores presentan aquí una revisión sobre la analgesia regional en cuidados intensivos, concentrándose en las principales ventajas y limitaciones de su uso en el enfermo crítico, y describen las técnicas regionales más usadas y su aplicabilidad en ese contexto.

Descriptores: ANALGESIA; TÉCNICAS ANESTÉSICAS, Regional; DOLOR; CUIDADOS INTENSIVOS; COMPLICACIONES, Generalidad.

INTRODUCCIÓN

Aproximadamente un 50% de los enfermos no quirúrgicos graves dicen sentir dolor durante el ingreso en las unidades de cuidados intensivos (UCIs)1. Las causas de dolor son muy variadas: enfermedad subyacente al ingreso, trauma, cirugía, cuidados de enfermería (movilización, aspiración de la vía aérea, fisioterapia), inmovilización prolongada y procedimientos invasivos terapéuticos, diagnósticos o de monitorización2,3.

El método considerado más confiable para la evaluación de la intensidad del dolor y de la respuesta a la analgesia es la indicación por parte del enfermo, con el recurso a escalas objetivas (Escala Visual Analógica, Escala Numérica Visual, Escala Descriptiva Visual)4,5,6. A menudo es difícil o imposible cuantificar la experiencia subjetiva al dolor en el enfermo crítico a causa de la presencia del tubo endotraqueal, de la inconsciencia y/o de la administración de fármacos sedativos que dificultan o imposibilitan la aplicación de esas escalas. La observación de las respuestas comportamentales (expresión facial, agitación, postura) o fisiológicas al stress (tensión arterial, frecuencia cardíaca, frecuencia respiratoria, diaforesis, presión intracraneal) puede constituir la única evaluación posible del dolor, pero con un gran margen de error ya que el sufrimiento y la respuesta autonómica a la agresión son el resultado de la activación de zonas diferentes del sistema nervioso central (SNC) con diferente sensibilidad a la activación nóxica7.

La analgesia eficaz en el enfermo crítico permite una mejoría de la función pulmonar y acelera el destete ventilatorio, la movilización rápida y la reducción de los niveles de catecolaminas plasmáticas y del consumo miocárdico de oxígeno8,9. La analgesia regional es particularmente eficaz en la obtención de esos objetivos, sobre todo en el contexto de la analgesia multimodal, en que se reducen las dosis necesarias de opioides para minimizar los efectos colaterales4,10.

Sin embargo, los enfermos en cuidados intensivos a menudo tienen contraindicaciones, como alteraciones de la coagulación, hipovolemia grave, inestabilidad hemodinámica y dificultad en la evaluación neurológica y en la ejecución técnica, lo que condiciona el uso de analgesia regional y obliga la cuidadosa evaluación del riesgo beneficio.

Existen pocos datos publicados acerca del uso de la analgesia regional en las unidades de cuidados intensivos, lo que dificulta la decisión con base en la evidencia.

El objetivo de este trabajo es presentar una revisión sobre la analgesia regional en cuidados intensivos, concentrándonos en las principales ventajas y limitaciones de su uso en el enfermo crítico y la descripción de las técnicas regionales más usadas y su aplicabilidad en ese contexto.

MÉTODOS

Se efectuó una revisión bibliográfica y una investigación en la Medline de los artículos publicados en los últimos 12 años con las palabras clave "analgesia regional", "cuidados intensivos", "bloqueos periféricos" y "enfermo crítico".

ANALGESIA REGIONAL

Bloqueo de nervios periféricos

No existen estudios prospectivos controlados y randomizados que evalúen el uso de bloqueos de nervios periféricos en la analgesia de enfermos críticos.

En los enfermos politraumatizados, en que las lesiones ortopédicas de los miembros forman parte de las lesiones múltiples, la presencia de dolor severo, seguido frecuentemente de alteraciones de la consciencia, traumáticas o iatrogénicas, condiciona el uso de dosis eficaces de opioides por el miedo de la depresión central que acompaña su uso en dosis elevadas. El uso de técnicas regionales para la analgesia del miembro superior e inferior puede ofrecer un control adecuado del dolor sin depresión central. El bloqueo de los nervios periféricos, guiado por la ecografía y/o por la neuroestimulación, y el uso de catéteres de estímulo en enfermos sedados permiten reducir las complicaciones asociadas a la técnica y aumentar su tasa de éxito11.

En un metaanálisis, Richman demostró que la analgesia efectuada por bloqueo continuo de nervios periféricos promovía una analgesia postoperatoria superior y con menos efectos colaterales al compararla con la analgesia con opioides12.

Por medio de los diversos abordajes para el bloqueo del plexo braquial, particularmente por la vía interescalénica o por vía axilar, podemos establecer una analgesia para el hombro y el miembro superior, respectivamente. El bloqueo continuo del nervio femoral es una buena opción analgésica en el postoperatorio de fracturas del cuello del fémur13,14. Esa técnica, cuando se asocia con el bloqueo ciático, permite una analgesia adecuada en la lesiones de todo el miembro inferior.

En las fracturas de elevado riesgo, como las tibiales y las distales del radio, la analgesia epidural y el bloqueo de nervios periféricos pueden dificultar el reconocimiento en cuidados intensivos del síndrome del compartimiento15. Para minimizar ese riesgo, la indicación para la analgesia por bloqueos periféricos debe ser discutida con el equipo de cirugía y la monitorización de la presión intracompartimental debe ser ponderada16.

El diagnóstico de bacteriemia por infección de los catéteres periféricos en técnicas de analgesia continua, puede ser difícil de diferenciar del agravamiento de la enfermedad. La región de la punción debe ser cuidadosamente inspeccionada cuando se administre el fármaco, y en el caso de que se sospeche de infección el catéter debe ser inmediatamente retirado. El examen microbiológico de la punta del catéter puede ser útil en la orientación de la antibioterapia. Para confirmar la sospecha de bacteriemia asociada, deben recogerse hemocultivos antes de la administración empírica de la antibioterapia17.

Los volúmenes elevados de anestésico local necesarios deben hacer con que sean cuidadosamente respetadas las dosis máximas recomendadas, principalmente cuando exista la combinación de diferentes bloqueos18.

En la Tabla I aparecen los principales problemas prácticos, indicaciones, contraindicaciones y dosis recomendadas para los bloqueos del miembro superior e inferior que pueden ser realizados en la UCI.

Analgesia epidural

La analgesia epidural es la técnica regional más a menudo usada en el enfermo crítico. No hay evidencias en cuanto a la reducción de la mortalidad con su uso, pero varios estudios han demostrado que cuando se compara con la analgesia con opioides parenterales, por los menos es menos equivalente en lo que se refiere al resultado, duración del ingreso en la UCI y duración del soporte ventilatorio. También se describe que la analgesia epidural reduce la incidencia de íleo paralítico y mejora la analgesia y la satisfacción del enfermo en situaciones de trauma torácico, cirugía abdominal, cirugía vascular y ortopédica mayor, pancreatitis aguda, cirugía cardíaca y angina pectoris no tratable4,19,20.

La disfunción pulmonar posterior a la cirugía torácica y abdominal ocurre principalmente debido al dolor que provoca una disfunción diafragmática e hipoventilación. Esos factores originan una reducción de la capacidad residual funcional (CRF) e hipoxemia. La disminución de la CRF puede traer como resultado atelectasias, alteraciones de la ventilación/perfusión y complicaciones pulmonares en el postoperatorio, particularmente infección pulmonar21. La analgesia epidural, cuando se compara con la analgesia endovenosa, aumenta la CRF en un 27% y reduce la tasa de complicaciones pulmonares22. Por otro lado, al reducir la necesidad de ventilación mecánica, reduce la iatrogenia, la neumonía asociada al ventilador, el tiempo de ingreso y los costes hospitalarios.

En la Tabla II están las principales indicaciones de la analgesia epidural en el enfermo crítico, como también las propuestas terapéuticas. En la Tabla III están las contraindicaciones absolutas y relativas para la colocación de catéter epidural.

Complicaciones

Los efectos colaterales más comunes de la analgesia epidural son la bradicardia y la hipotensión resultantes del bloqueo simpático y que pueden ser minimizados con el uso de bajas concentraciones o de dosis incrementadas de anestésicos locales. Otros efectos colaterales que se relacionan con el uso de opioides, son el prurito, las náuseas, los vómitos, la sedación y la depresión respiratoria; relacionados con el uso de la clonidina se refieren a la sedación, la bradicardia y la hipotensión. La adición de morfina, fentanil, sufentanil o la clonidina a la analgesia epidural en cuidados intensivos debe ser ponderada individualmente, pudiendo ser una ventaja para el enfermo crítico, una vez que permite reducir las dosis de anestésicos locales, optimizar la analgesia y reducir las alteraciones hemodinámicas.

La ventilación con presión positiva principalmente si viene acompañada de altas presiones, reduce el retorno venoso, puede influir en la dispersión del anestésico local en las epidurales torácicas y favorece una dispersión tendencialmente en sentido caudal23.

Algunos estudios han revelado que el riesgo de infección asociado a la analgesia epidural en cuidados intensivos parece ser bajo y que la presencia de dos signos locales de inflamación es un fuerte predictor de infección local y del catéter epidural24.

La profilaxis antibiótica para la colocación de catéter epidural no está recomendada por rutina en un contexto intra y extracuidados intensivos, aunque algunos estudios demuestren una reducción en las tasas de colonización del catéter25. El uso de medidas de asepsia máximas parecidas con las de la colocación de catéteres venosos centrales, reduce el riesgo de infección y está recomendado26. El catéter debe ser retirado si surgen signos inflamatorios y/o pus en la región de infección, o incluso si hay sospecha de infección del Sistema Nervioso Central.

El uso de catéter epidural en enfermos con alteraciones de la coagulación puede estar asociado a la formación de hematomas epidurales o subdurales, cuyo diagnóstico está dificultado en el enfermo crítico. Se recomienda que el catéter epidural esté bien fijo para evitar la retirada accidental. Si ella ocurriese, se le debe dar una particular atención a la vigilancia neurológica. La colocación de catéteres tunelizados podrá evitar su exteriorización durante las maniobras de posicionamiento del enfermo crítico.

El correcto posicionamiento del catéter en el espacio epidural debe ser evaluado por una aspiración cuidadosa antes de la administración de fármacos. Ese parece ser el método más sencillo y seguro para prevenir la inyección intravascular de anestésicos locales en el enfermo crítico, una vez que esos pueden presentar una respuesta alterada a la administración de dosis-test con la adrenalina, por el uso de bloqueantes beta, bloqueantes de los canales de calcio, clonidina y catecolaminas endógenas y exógenas7. Como opción a ese método de confirmación del posicionamiento puede ser usada la estimulación eléctrica por medio del catéter epidural (Tsui Test) o confirmación radiológica posterior a la administración de contraste radiopaco en el espacio epidural27. La inyección intravascular de anestésicos locales se asocia a la toxicidad significativa que afecta primariamente el Sistema Nervioso Central (SNC) y se manifiesta por el surgimiento de síntomas prodrómicos (mareos, tínitus, parestesias de la lengua, adormecimiento perioral, sabor metálico, trastornos auditivos y visuales) que anteceden las convulsiones (por bloqueo de las vías inhibitorias) y posteriormente depresión central. Las manifestaciones en el plano cardiovascular surgen posteriormente al aparecimiento de signos y síntomas en el SNC y es más común con la bupivacaína, dado el bloqueo de larga duración característico de ese fármaco slow in-slow out. Las manifestaciones sistémicas están relacionadas con el estado ácido-base del enfermo. El aumento de la PaCO2 y la acidosis originan una reducción del umbral convulsivo y un aumento de la tasa de reacciones tóxicas sistémicas. La hipercapnia aumenta el flujo sanguíneo cerebral y el uptake de los anestésicos locales28.

También tenemos que tener en cuenta la toxicidad local: (1) reacciones alérgicas, más comunes con los amino ésteres y relacionadas con los mecanismos de presensibilización al ácido paraaminobenzoico (PABA). Los síntomas son predominantemente cutáneos desde exantema urticariforme, con el inicio en la cara y su extensión por el cuello y el tórax, y acompañado de prurito intenso, hasta el choque anafiláctico; (2) miotoxicidad, relacionada con la administración intramuscular de anestésico local en altas concentraciones; (3) neurotoxicidad, común a todos los anestésicos locales (más común con la lidocaína) por acumulación de anestésicos locales en altas concentraciones cerca de los troncos nerviosos (Síndrome de la Cola de Caballo).

En la Tabla IV se sintetizan las complicaciones más comunes asociadas con el bloqueo epidural.

Alteraciones de la hemostasis

La ejecución de técnicas regionales para la analgesia en los enfermos bajo terapéutica inhibidora de la hemostasis, en un contexto intra o extracuidados intensivos, debe estar orientada de acuerdo con las recomendaciones existentes, para minimizar riesgos y aumentar la seguridad. En las Tablas V, VI y VII están las recomendaciones actuales de la Sociedad Portuguesa de Anestesiología y validadas por el Colegio de la Especialidad de Anestesiología para la ejecución de los bloqueos del neuro eje, bloqueos periféricos y retirada de los catéteres en los enfermos bajo terapéutica antiagregante plaquetaria y anticoagulante29.

DISCUSIÓN

La analgesia regional por bloqueos de nervios periféricos o bloqueos del neuro eje debe ser vista como eficaz y segura en la analgesia del enfermo crítico, usada aisladamente o en un contexto multimodal. Permite disminuir la incomodidad del enfermo y reducir el stress fisiológico y psicológico, tal como en los enfermos no críticos. La reducción de los efectos laterales de los opioides y de los sedativos sistémicos permite la movilización y la rehabilitación rápidas junto con la mejoría de la satisfacción del enfermo.

La presencia de alteraciones de la coagulación, en un contexto de fracaso multiorgánico o de causa iatrogénica, constituye la principal limitación a su uso en los enfermos críticos. Las recomendaciones para los enfermos hipocoagulados o en antiagregación plaquetaria deben ser seguidas en los cuidados intensivos.

El uso de analgesia regional en contexto de UCI debe ponderar la relación riesgo/beneficio dada a la cooperación limitada del enfermo en la colocación y monitorización. Las indicaciones para su uso deben ser cuidadosa e individualmente establecidas, a tono con la anatomía, condición clínica del enfermo, presencia de contraindicaciones y condiciones logísticas30.

Para garantizar la seguridad y la eficacia es fundamental: (a) una correcta formación de los profesionales de salud (médicos, enfermeros y fisioterapeutas) en la prevención y detección rápida de las complicaciones e intercurrencias; (b) creación de un registro detallado de la evaluación del dolor y de las intercurrencias, que permita una auditoría en tiempo real, de la eficacia y de la seguridad de las terapéuticas aplicadas y su ajuste en tiempo; (c) elaboración de protocolos y de reglas de seguridad que anticipen eventuales situaciones de carácter extraordinario y así permitan la optimización de los regímenes terapéuticos.

Verificamos en la literatura que la analgesia regional en el enfermo crítico es muy poco usada a pesar de las evidencias de resultados favorables. Pero incluso así, las evidencias disponibles se limitan a casos clínicos, estudios de cohorte u opiniones de peritos y se fundamentan, esencialmente, en estudios proyectados para el manejo intraoperatorio de enfermos quirúrgicos, en que la admisión en cuidados intensivos forma parte del proceso perioperatorio. No existen estudios específicamente proyectados para evaluar el uso de la analgesia regional en ese contexto4,7. La confirmación de los resultados promisorios encontrados en la bibliografía necesita evaluaciones prospectivas de las ventajas y limitaciones de la analgesia epidural y de los bloqueos regionales que permitan la definición concreta del su rol en la analgesia en Cuidados Intensivos.

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  • Analgesia regional en cuidados intensivos

    Luísa GuedesI; Helena RebeloI; Raquel OliveiraI; Aida NevesII
  • Fechas de Publicación

    • Publicación en esta colección
      25 Set 2012
    • Fecha del número
      Oct 2012

    Histórico

    • Recibido
      30 Ago 2011
    • Acepto
      30 Set 2011
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