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Síndrome metabólico en ambulatorio cardiológico

Resúmenes

FUNDAMENTO: En Brasil, la prevalencia de síndrome metabólico (SM) es poco conocida en varias regiones. OBJETIVO: Analizar la prevalencia del SM, sus componentes y la concordancia entre dos criterios diagnósticos en una población con edad > 13 años. MÉTODOS: Estudio transversal, realizado de junio a octubre de 2007, en 719 pacientes, en ambulatorios cardiológicos de São Luís, MA. Se midió la presión arterial (PA), peso, altura, circunferencia abdominal y perfil lipídico. Se evaluaron los factores de riesgo para el SM según el criterio de la International Diabetes Federation (IDF). Razones de prevalencia de intervalos de confianza del 95% se estimaron por la regresión de Poisson. RESULTADOS: La prevalencia de SM fue mayor en ambos sexos por el concepto de la IDF (62,3% en hombres y 64,6% en mujeres), con relación al del National Cholesterol Education Program - Adult Treatment Prevention (NCEP ATPIII) (48,9% en hombres y 59% en mujeres). Los componentes del SM más prevalentes fueron: hipertensión arterial sistémica - HAS (87,2% y 86%); hipertrigliceridemia (84,4% y 82,5%); circunferencia abdominal alterada (77,8% y 100%); HDL-c bajo (58,1% y 49,9%); y glucemia alterada (59,9% y 51,9%), por los conceptos NCEP ATPIII y IDF, respectivamente. Después del análisis ajustado, edad > 60 años e índice de masa corporal (IMC) > 30 se asociaron a un mayor riesgo de SM (p < 0,001). CONCLUSIÓN: La prevalencia de SM fue mucho mayor que la población general; la HAS fue el componente más prevalente. Hubo buena concordancia entre los dos criterios, siendo óptima en el sexo femenino y regular en el masculino.

Síndrome metabólico; instituciones de asistencia ambulatoria; ética; cardiología


FUNDAMENTO: No Brasil, a prevalência de síndrome metabólica (SM) é pouco conhecida em várias regiões. OBJETIVO: Analisar a prevalência da SM, seus componentes e a concordância entre dois critérios diagnósticos numa população com idade > 13 anos. MÉTODOS: Estudo transversal, realizado de junho a outubro de 2007, em 719 pacientes, em ambulatórios cardiológicos de São Luís, MA. Mediu-se a pressão arterial (PA), peso, altura, circunferência abdominal e perfil lipídico. Avaliaram-se os fatores de risco para a SM segundo o critério da International Diabetes Federation (IDF). Razões de prevalência e intervalos de confiança de 95% foram estimados pela regressão de Poisson. RESULTADOS: A prevalência da SM foi maior em ambos os sexos pelo conceito da IDF (62,3% em homens e 64,6% em mulheres), em relação ao do National Cholesterol Education Program - Adult Treatment Prevention (NCEP ATPIII) (48,9% em homens e 59% em mulheres). Os componentes da SM mais prevalentes foram: hipertensão arterial sistêmica HAS (87,2% e 86%); hipertrigliceridemia (84,4% e 82,5%); circunferência abdominal alterada (77,8% e 100%); HDL-c baixo (58,1% e 49,9%); e glicemia alterada (59,9% e 51,9%), pelos conceitos NCEP ATPIII e IDF, respectivamente. Após análise ajustada, idade > 60 anos e índice de massa corporal (IMC) > 30 foram associados a um maior risco de SM (p < 0,001). CONCLUSÃO: A prevalência da SM foi bem maior que a população geral; a (HAS) foi o componente mais prevalente. Houve boa concordância entre os dois critérios, sendo ótima no sexo feminino e regular no masculino.

Sindrome metabólica; instituições de assistência ambulatorial; ética; cardiologia


BACKGROUND: In Brazil, the prevalence of the metabolic syndrome (MS) is little known in several regions. OBJECTIVE: To analyze the prevalence of MS, its components and the agreement between two diagnostic definitions in a population aged > 13 years. METHODS: Cross-sectional study conducted from June to October 2007 in 719 patients of outpatient cardiology clinics in the city of São Luis, State of Maranhão, Brazil. Blood pressure (BP), weight, height, waist circumference and lipid profile were measured. Risk factors for MS were evaluated according to the International Diabetes Federation (IDF) definition. Prevalence ratios and 95% confidence intervals were estimated using Poisson regression. RESULTS: The prevalence of MS was higher in both genders when using IDF definition (62.3% in men and 64.6% in women) than when using that of the National Cholesterol Education Program - Adult Treatment Prevention (NCEP ATPIII) (48.9% in men and 59% in women). The most prevalent MS components were: hypertension (87.2% and 86%); hypertriglyceridemia (84.4% and 82.5%); increased waist circumference (77.8% and 100%); low HDL-c (58.1% and 49.9%); and high blood glucose (59.9% and 51.9%), using NCEP ATPIII and IDF definitions, respectively. In the adjusted analysis, age > 60 years and body mass index (BMI) > 30 were associated with a higher risk of MS (p<0.001). CONCLUSION: The prevalence of MS was much higher than in the overall population, and hypertension was the most prevalent component. There was good agreement between the two definitions, very good in the female gender and moderate in the male gender.

Metabolic syndrome; ambulatory care facilities; ethic; cardiology


ARTÍCULO ORIGINAL

Faculdade de Medicina da Universidade Federal do Maranhão (UFMA/UDI Hospital), São Luís, MA - Brasil

Correspondencia

RESUMEN

FUNDAMENTO: En Brasil, la prevalencia de síndrome metabólico (SM) es poco conocida en varias regiones.

OBJETIVO: Analizar la prevalencia del SM, sus componentes y la concordancia entre dos criterios diagnósticos en una población con edad > 13 años.

MÉTODOS: Estudio transversal, realizado de junio a octubre de 2007, en 719 pacientes, en ambulatorios cardiológicos de São Luís, MA. Se midió la presión arterial (PA), peso, altura, circunferencia abdominal y perfil lipídico. Se evaluaron los factores de riesgo para el SM según el criterio de la International Diabetes Federation (IDF). Razones de prevalencia de intervalos de confianza del 95% se estimaron por la regresión de Poisson.

RESULTADOS: La prevalencia de SM fue mayor en ambos sexos por el concepto de la IDF (62,3% en hombres y 64,6% en mujeres), con relación al del National Cholesterol Education Program - Adult Treatment Prevention (NCEP ATPIII) (48,9% en hombres y 59% en mujeres). Los componentes del SM más prevalentes fueron: hipertensión arterial sistémica - HAS (87,2% y 86%); hipertrigliceridemia (84,4% y 82,5%); circunferencia abdominal alterada (77,8% y 100%); HDL-c bajo (58,1% y 49,9%); y glucemia alterada (59,9% y 51,9%), por los conceptos NCEP ATPIII y IDF, respectivamente. Después del análisis ajustado, edad > 60 años e índice de masa corporal (IMC) > 30 se asociaron a un mayor riesgo de SM (p < 0,001).

CONCLUSIÓN: La prevalencia de SM fue mucho mayor que la población general; la HAS fue el componente más prevalente. Hubo buena concordancia entre los dos criterios, siendo óptima en el sexo femenino y regular en el masculino. (Arq Bras Cardiol 2010; 94(1) : 44-51)

Palabras clave: Síndrome metabólico, instituciones de asistencia ambulatoria, ética, cardiología.

Introducción

El síndrome metabólico (SM) consiste en la presencia de alteraciones glucídicas (hiperinsulinemia, resistencia a la insulina, intolerancia a la glucosa o diabetes mellitus tipo 2) y lipídicas (aumento de triglicéridos y LDL-colesterol y disminución del HDL-colesterol), de la obesidad abdominal, de la hipertensión arterial (HA) y de disturbios de la coagulación (aumento de la adhesión plaquetaria y del inhibidor del activador del plasminógeno-PAI-1). También hay un estado proinflamatorio, con aumento de la proteína C reactiva, factor de necrosis tumoral alfa e interleuquina 61.

Hay una estrecha asociación de causa efecto entre el SM y las enfermedades cardiovasculares (ECV). El SM aumenta la mortalidad general en cerca de una vez y media y la cardiovascular en aproximadamente dos veces y media2. La predisposición genética, alimentación inadecuada y sedentarismo contribuyen para su desencadenamiento3,4.

En 1998, la World Health Organization (WHO) desarrolló un criterio de definición para SM incluyendo, además de la hipertensión - arterial sistémica (HAS) y de la dislipidemia, la obesidad y la microalbuminuria5. En 2001, el National Institute of Health, por medio del National Cholesterol Education Program (NCEP), y el 3rd Adult Treatment Panel (ATP III) sugirieron otra definición del SM, sin incluir peso y microalbuminuria, necesitando por lo menos tres componentes anormales6.

En abril de 2005, se publicó la primera Directriz Brasileña de Diagnóstico y Tratamiento del Síndrome Metabólico, con el apoyo de la Sociedad Brasileña de Cardiología, que utilizó el criterio NCEP ATPIII para definir SM7. En 2006, la IDF formuló una nueva definición para SM, considerando las diferentes etnias8.

El SM aumenta con la edad, en hombres y mujeres, alcanzando el 50% entre 60 y 69 años9,10. Un estudio reciente mostró que cerca del 20% al 25% de los niños y adolescentes obesos presentan resistencia a la insulina, elemento clave del SM y que puede llevar a la diabetes tipo 210,11.

En Ribeirão Preto, São Paulo, un estudio de población realizado en adultos con edades entre 22 y 28 años, publicado en 2007, mostró prevalencia del 7,6%12. Datos de la WHO muestran que en países en desarrollo, la obesidad aumentó de dos a tres veces en la última década13.

Existe un sinnúmero de estudios internacionales sobre SM, siendo escasos en Brasil, razón de interés para estudiar esta entidad en nuestro medio, con gran heterogeneidad de factores relacionados al mismo, como los de orden demográfico y los inherentes al estilo de vida de la población.

Métodos

Se realizó un estudio transversal - aprobado por el Comité de Ética en Investigación del Hospital Universitario de la Universidad Federal de Maranhão -, en 719 pacientes examinados en ambulatorios de cardiología en la ciudad de São Luís (MA), entre el 1º de junio y el 1º de octubre de 2007, con edades entre 13 y 96 años y edad promedio de 56,3 años. A todos los individuos se les presentó un Formulario de Consentimiento Informado, firmado en caso de concordancia. Se incluyeron a todos los que comparecieron al ambulatorio de cardiología en el período mencionado, excepto los de edad inferior a 13 años, los que no tenían exámenes de laboratorio y los que se negaron a hacerlos, gestantes y pacientes con ascitis. A todos los individuos se les aplicó una ficha protocolo conteniendo: nombre, sexo, edad, color de piel, escolaridad, profesión, ingreso familiar, antecedentes de morbilidad personal, actividad física, tabaquismo, alcoholismo, medida de la presión arterial (PA), circunferencia abdominal, altura, peso, índice de masa corporal (IMC), glucemia en ayunas, triglicéridos (TG), colesterol total (CT), HDL-colesterol y LDL-colesterol.

El concepto de SM se definió según las directrices del NCEP ATP III y del IDF6,7, tomando en consideración los siguientes factores de riesgo: circunferencia abdominal, TG, HDL-c, PA y glucemia en ayunas. El diagnóstico de SM por el NCEP ATPIII consiste en la alteración de tres de los factores antes mencionados, mientras que por la IDF el mismo se realiza por el aumento de la circunferencia abdominal más otros dos factores de riesgo. Tanto por el concepto del NCEP como por el de la IDF, los valores alterados de los TG (> 150 ml/dL), PA (> 130/85 mmHg) y HDL-c (< 40 para hombres y < 50 para mujeres) son los mismos. La circunferencia abdominal alterada por el NCEP ATPIII es > 102 cm para hombres y > 88 cm para mujeres, mientras que por la IDF los valores son > 90 cm para hombres y > 80 cm para mujeres, valores éstos propuestos para pueblos sudamericanos. El valor de glucemia en ayunas alterada en ambos conceptos, NCEP e IDF, fue considerado > 100mg/dl. Se evaluó también la relación TG/HDL-c alterada > 3,5. Por el índice Kappa de Cohen14 se evaluó la concordancia en el diagnóstico de SM por los dos criterios.

La medida de la PA se realizó por el método indirecto con técnica de auscultación y esfigmomanómetros aneroides calibrados. El manguito se seleccionó adecuándolo al brazo y colocado sin dejarlo flojo, cerca de 2 a 3 centímetros por encima de la fosa cubital. El nivel de la presión sistólica se estimó palpando el pulso radial e inflando el manguito hasta su desaparición. Después de inflar rápidamente y aguardar un minuto, se colocó la campánula del estetoscopio sobre la arteria braquial. El manguito se infló rápidamente hasta superar en 20 a 30 mmHg el nivel estimado de la presión sistólica. La deflación se realizó lentamente (velocidad de 2 a 4 mmHg por segundo) determinando la presión sistólica por la ausculta del primer sonido (fase I de Korotkoff) y la diastólica por la desaparición del sonido (fase V de Korotkoff). Los pacientes no debían haber practicado ejercicio físico de 60 a 90 minutos antes de la evaluación, ni ingerido bebidas alcohólicas o café, o fumado 30 minutos antes de la toma de la presión arterial. Los individuos se encontraban sentados, durante por lo menos cinco minutos en reposo, en ambiente calmo, sin ropa en el miembro superior derecho, manteniendo las piernas descruzadas, los pies apoyados en el piso, el dorso recostado en la silla y relajado, con el brazo apoyado a la altura del corazón, con la palma de la mano dirigida hacia arriba y el codo ligeramente flexionado, sin hablar durante el procedimiento. La medida se realizó en dos momentos diferentes, con intervalo de aproximadamente dos minutos. El nivel más bajo se consideró la medida de la PA15. Se clasificaron como hipertensos pacientes con presión arterial sistólica (PAS) > 140 mmHg y/o presión arterial diastólica (PAD) > 90 mmHg, o en de antihipertensivos16.

El peso corporal se obtuvo con balanza electrónica (precisión de 0,1 kg) con la vejiga vacía y los individuos llevando sólo ropa interior. La estatura se determinó con estadímetro de balanza, con el individuo descalzo y con precisión de 0,5 cm. Se calculó el IMC (IMC = Peso/Estatura), de acuerdo con la recomendación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para la evaluación del estado nutricional13. Se utilizaron los siguientes puntos de corte para la clasificación de los individuos con relación al IMC (kg/m2): normal < 25; sobrepeso de 25 a 29,99 y obeso > 30. Se consideró exceso de peso cuando este índice era > 25kg/m². La medición de la circunferencia abdominal se realizó en el punto medio entre la cresta ilíaca y la cara externa de la última costilla, con cinta métrica inelástica, en posición ortostática, con el paciente de pie, sin ropa en el tórax, y al final de la expiración17.

Los exámenes bioquímicos se realizaron en aparato ADVIA 1650. La concentración de LDL-c se calculó por la fórmula de Friedwald18.

Se consideraron tabaquistas a los que consumían cigarrillos, independientemente de la cantidad de cigarrillos en el período de realización de la investigación. No se consideraron los tabaquistas pasivos.

El uso de alcohol fue considerado en personas que bebían independientemente del tipo y de la cantidad.

Se consideraron sedentarios a los pacientes que no realizaban actividad física por lo menos tres veces por semana, durante treinta minutos por día8.

El grupo control estaba constituido por individuos sin SM por ambos criterios, NCEP ATPIII e IDF.

Los análisis estadísticos se realizaron en el Stata 9.0. En la evaluación de la asociación entre los factores de riesgo estudiados y la prevalencia de SM, según el criterio de IDF, se empleó el modelo de regresión de Poisson18. Estudios demuestran que cuando la prevalencia del evento es superior al 10%, el uso del modelo de regresión logística para la estimación del odds ratio promueve una superestimación del riesgo. Se calcularon las razones de prevalencia por el método robusto y su respectivo intervalo de confianza del 95%. El nivel de significancia adoptado fue el 5%. Todas las variables que presentaron p < 0,20 en el análisis no ajustado fueron seleccionadas para el análisis multivariable. En el análisis ajustado se utilizó el método de selección de variables por pasos (stepwise) con eliminación retrógrada. Sólo quedaron en el modelo final aquellas variables asociadas a un valor de P < 0,1019.

Resultados

Las características basales de los individuos estudiados en ambulatorio de cardiología se resumen en la Tabla 1. La edad promedio de los hombres fue de 56 años y de las mujeres, 58 años. Entre los antecedentes de morbilidad personales - insuficiencia coronaria (ICo), accidente vascular cerebral (AVC), enfermedad vascular periférica (EVP), diabetes mellitus (DM) y HAS -, sólo la ICo fue diferente según el sexo, con el 23,4% entre los hombres, contra el 13,9% entre las mujeres (p < 0,001). La prevalencia del SM fue mayor en ambos sexos por el concepto de la IDF (62,3% para hombres y 64,6% para mujeres), cuando se la compara con el del NCEP (48,9% para hombres y 59% para mujeres). Entre las variables lipídicas, los promedios del CT (194 mg/dl), del HDL-c (51 mg/dl) y del LDL-c (118 mg/dl) fueron más elevadas entre las mujeres que entre los hombres (CT 183 mg/dl, HDL-c 44 mg/dl y LDL-c 108,5 mg/dl). Los promedios de los TG (141 mg/dl) y de la relación CT/HDL (4,1) fueron mayores entre los hombres con relación a las mujeres, TG (120 mg/dl) y CT/HDL (-3,8). Los promedios de los TG (141 mg/dl) y de la relación TG/HDL-c > 3,8 (38,3) fueron mayores entre los hombres con relación a las mujeres, TG (120 mg/dl) y TG/HDL-c (19,2). En el sexo masculino hubo un 30,7% de HDL-c bajo con relación al 42,6% en el sexo femenino, mientras que el 68,7% de los hombres presentaron hipertrigliceridemia contra el 54,6% de las mujeres. Obesidad, variables hemodinámicas, tabaquismo y actividad física no tuvieron diferencia estadísticamente significativa entre hombres y mujeres. El uso de alcohol fue significativamente mayor entre los hombres (49,2%) que entre las mujeres (19,5%).

La Tabla 2 describe las características de los individuos estudiados de acuerdo con las definiciones de SM por el NCEP e IDF. Entre los 719 individuos evaluados, 243 no tenían SM, 391 individuos tenían por lo menos el concepto del NCEP y 457 por el de la IDF. Individuos con SM por los dos conceptos eran más viejos, tenían más antecedentes de morbilidad personales (DM, HAS y ICo), glucemia en ayunas alterada y variables lipídicas alteradas (HDL-c más bajo, LDL-c más alto, relación CT/HDL-c más elevada, hipertrigliceridemia, relación TG/HDL-c > 3,8). También eran más pesados y más bajos, con IMC, circunferencia de la cintura y presión arterial sistólica y diastólica más elevadas. Tenían más obesidad, exceso de peso, circunferencia de la cintura alterada e hipertensión. Comparando los individuos con y sin SM, no fueron diferentes los antecedentes de morbilidad personales (AVC y EVP), colesterol total y las variables de estilo de vida (tabaquismo, consumo de alcohol y actividad física).

La concordancia general medida por el Kappa fue de 0,70, p < 0,001. En el sexo femenino, el valor del Kappa fue 0,82 (p < 0,001) y en el masculino fue 0,58 (p < 0,001).

La Tabla 3 muestra el análisis no ajustado de los factores de riesgo para SM por el criterio de la IDF. Pacientes con edad > 40 años, escolaridad < 8 años de estudio, Ingreso familiar < 1.000 reales, que vivían con compañero (casados o en unión consensual) y sobrepeso y/u obesidad tuvieron mayor riesgo de SM.

La Tabla 4 muestra el análisis ajustado de los factores de riesgo para SM por el criterio de la IDF. Tuvo significancia estadística edad > 60 años e IMC > 30.

Discusión

Se utilizaron en este estudio, dos conceptos para definición del SM, el del NCEP ATPIII (I Directriz Brasileña de Diagnóstico y Tratamiento del Síndrome Metabólico) y el de la IDF, evaluando a 719 individuos en ambulatorio de cardiología. La prevalencia del SM fue del 54,4% (391 casos) según el NCEP y del 63,6% (457 casos) de acuerdo con el IDF, siendo más prevalente en el sexo femenino. Los componentes del SM más prevalentes fueron: HAS, hipertrigliceridemia y circunferencia abdominal alterada, seguidos de HDL-c bajo y glucemia alterada. Entre las comorbilidades asociadas, la ICo y el AVC fueron las más presentes. El SM fue más prevalente entre los individuos de bajos ingresos y de edad más elevada. El tabaquismo, consumo de alcohol y actividad física no estuvieron significativamente asociados al SM. Después del análisis ajustado de los factores de riesgo para SM, por el criterio de la IDF, edad > 60 años e IMC > 30 fueron los que estuvieron significativamente asociados a un mayor riesgo de SM.

Prevalencia de síndrome metabólico general y según el sexo

En un estudio en la población urbana de Corea, en individuos con edad de 30 a 80 años, por el criterio del NCEP ATP III, la prevalencia del SM fue del 16% en hombres y del 10,7% en mujeres20. Ya por la IDF, la prevalencia fue del 29% en hombres y del 16,8% en mujeres. En la ciudad de Porto, en Portugal21, un estudio con 1.436 adultos (hombres y mujeres) mostró prevalencia de SM del 23,9% (27% en mujeres y 19,1% en hombres) por el criterio del NCEP ATPIII. En Taiwán, en 5.936 individuos con edades entre 20 y 79,9 años, la prevalencia de SM fue del 15,7% por el concepto del NCEP ATPIII y del 14,3% por el de la IDF22. En un estudio realizado en los Estados Unidos23, con 3. 601 participantes con edades variante entre 20 y 70 años, la prevalencia de SM fue del 34,5% por el concepto del NCEP ATPIII (33,7% entre los hombres y 35,4% entre las mujeres), y del 39,% por el IDF (39,9% en los hombres y 38,1% en las mujeres). En Dinamarca24, un estudio entre 2.493 individuos, con edades entre 41 y 72 años, mostró prevalencia del 21% (17,5% para hombres y 23,8% para mujeres) por la IDF y del 16% (14,3% para hombres y 18,6% para mujeres) por el NCEP ATPIII. En 2007, 1.007 individuos fueron evaluados en Talca, Chile, con edades de 18 a 74 años25, mostrando prevalencia del SM por los conceptos del NCEP ATPIII e IDF del 36,4% y del 29,5%, respectivamente.

En el Hospital Universitário de Santa Catarina26, por el concepto de la IDF, la prevalencia del SM fue del 21,9% en el sexo femenino y del 19,4% en el masculino. En Vitória, Espírito Santo27, por el NCEP ATPIII, la prevalencia de SM en 1.663 individuos con edades entre 25 y 64 años fue del 29,8%. En un área rural del semiárido bahiano, se estudiaron a 240 individuos con edad > 25 años28 y, por el criterio del NCEP ATPIII, la prevalencia del SM fue del 30% (38,4% en mujeres y 18,6% en hombres).

En este estudio, la prevalencia de Sm, el 54,4% según el NCEP y el 63,6% de acuerdo con el IDF, fue más elevada que en los estudios antes citados, pues la muestra aquí estudiada estaba formada por pacientes atendidos en ambulatorio de cardiología, la mayoría con enfermedades cardiovasculares. Hubo mayor prevalencia del SM en el sexo femenino como en los estudios de Dinamarca24, Santa Catarina26 y de la ciudad de Porto21, diferente de los estudios de Corea20, Estados Unidos de América24 y Talca (Chile)25, en los cuales la prevalencia fue mayor en el sexo masculino.

Prevalencia de los componentes del síndrome metabólico

Un estudio dinamarqués24 mostró mayor prevalencia de los componentes del SM: obesidad (38,6%), HDL-c bajo (37,1%) y HAS (34%), mientras que en este estudio prevalecieron: HAS (87,2%), hipertrigliceridemia (84,4%) y HDL-c bajo (58,1%), por el concepto del NCEP ATP III. Los niveles de CT, LDL-c y los niveles de TG fueron más elevados en el estudio de Dinamarca24, mientras que los niveles de HDL-c bajo fueron más altos en este estudio. La relación CT/HDL-c fue mayor en el estudio dinamarqués (NCEP ATPIII), similar al observado en este trabajo. La presencia del 27,7% de DM en este estudio fue mucho mayor que el 7% relatado en el trabajo dinamarqués24.

El consumo de alcohol y la actividad física fueron más prevalentes en este estudio, al contrario del tabaquismo, más frecuente en el trabajo dinamarqués24 (44% contra 7,4%).

En un estudio en el semiárido bahiano28, el HDL-c bajo (70,4%) y la elevación de la PA (57,1%) fueron los componentes del SM más prevalentes, mientras que en este estudio fueron: exceso de peso y obesidad (92,9%), HAS (87,2%) e hipertrigliceridemia (84,4%). En este estudio, la obesidad abdominal, exceso de peso y reducción del HDL-c fueron más prevalentes en el sexo masculino, al contrario de lo que ocurrió en el semiárido bahiano, en que la mayor prevalencia de estos factores se observó en el sexo femenino.

Concordancia entre las dos definiciones de síndrome metabólico

La concordancia general, medida por el kappa, fue considerada buena, indicando que ambos criterios pueden ser utilizados en la práctica clínica. La concordancia fue óptima en el sexo femenino y regular en el sexo masculino, sugiriendo que los criterios actualmente utilizados no están muy adecuados para el sexo masculino (concordancia regular).

Posiblemente, la menor concordancia en el diagnóstico de SM entre los dos criterios en el sexo masculino se derivó del criterio utilizado para caracterizar circunferencia de la cintura alterada. Por el criterio de la IDF, no hay diferencia en la prevalencia de circunferencia de la cintura alterada entre los sexos, mientras que por el NCEP ATPIII, hay diferencia, pues el 64,6% y de las mujeres y el 43,8% de los hombres tienen circunferencia de la cintura alterada. Ello sugiere que el criterio de diagnóstico de circunferencia de la cintura alterada utilizado por el NCEP ATPIII para hombres tal vez sea inadecuado y haya sido el responsable por la baja concordancia observada.

Los datos de este estudio son similares a los encontrados por Cristal Lee et al, en un trabajo con 22.403 individuos y edad > 35 años, que muestran una óptima concordancia para mujeres entre los dos conceptos29. Clara Kelliny et al30, en un trabajo con 1.218 individuos con edad promedio de 42 años, mostraron concordancia general de 0,82 entre los conceptos30.

Factores asociados al síndrome metabólico

En este estudio, la obesidad (IMC > 30kg/m²), después del análisis ajustado de los factores de riesgo, estuvo significativamente asociada al SM. Este resultado fue observado en otros estudios, como EEUU23, Chile25, así como en Brasil, en el estudio de Vitória (ES)27 y del semiárido bahiano28. Posiblemente este hecho haya ocurrido por la reducción de actividad física y aumento de la ingesta de grandes cantidades de calorías en esas poblaciones.

Entre los americanos23, la prevalencia de SM fue mayor en los individuos de mayores ingresos, al contrario de este estudio, en el cual la prevalencia fue más elevada en personas con menores ingresos. El tabaquismo y el consumo de alcohol fueron independientemente asociados al SM en el trabajo americano23, lo que no ocurrió en este trabajo.

En este estudio, la prevalencia del SM aumentó con la edad, sucediendo lo mismo en los estudios realizados en el semiárido bahiano28, en Vitória27, Talca25 y en los Estados Unidos23.

Conclusión

El estudio mostró que la prevalencia del SM en ambulatorio cardiológico fue mucho mayor que la población general; la HAS fue el componente más prevalente. Hubo buena concordancia entre los dos criterios, siendo óptima para el sexo femenino y regular para el sexo masculino.

Potencial Conflicto de Intereses

Declaro no haber conflicto de intereses pertinentes.

Fuentes de Financiación

El UDI Hospital financió el presente estudio.

Vinculación Académica

Este artículo forma parte de la tesis de Maestría de José Bonifácio Barbosa de la Universidad Federal de Maranhão - UFMA.

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  • Síndrome metabólico en ambulatorio cardiológico

    José Bonifácio Barbosa; Antonio Augusto Moura da Silva; Fabrício de Flores Barbosa; Francisco das Chagas Monteiro Júnior; José Albuquerque de Figueiredo Neto; Vinicius José da Silva Nina; Waston Gonçalves Ribeiro; Eduardo Durans Figuerêdo; José Xavier de Melo Filho; Maria Bethânia da Costa Chein
  • Fechas de Publicación

    • Publicación en esta colección
      22 Set 2010
    • Fecha del número
      Ene 2010

    Histórico

    • Recibido
      11 Set 2008
    • Acepto
      09 Dic 2008
    • Revisado
      05 Nov 2008
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