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Guardianes antárticos: El compromiso como resultado de variables identitarias y actitudes ecológicas

Resumen

La investigación se interesa tanto en variables ecológicas como identitarias (sociales) que participan en el aumento del compromiso ambiental en el cuidado antártico. Dos estudios con habitantes del sur austral de dos ciudades, y otro con una muestra nacional de tres zonas geográficas diferentes (norte, centro y sur) participaron contestando una encuesta autoaplicada. Los instrumentos midieron la percepción de responsabilidad personal en el cuidado antártico en el presente y futuro, la valoración antártica, la identidad regional ecológica antártica y creencias ambientales. Los resultados centrales muestran que la identificación con el territorio antártico resulta importante para determinar la percepción de responsabilidad y compromiso en su cuidado, y que este proceso es mediado por el valor que se le otorga al continente helado. Dicha mediación se observó tanto en la muestra de locales como de nacionales. Se discuten estos resultados en torno a la importancia de considerar variables identitarias al desarrollar modelos orientados al fomento de la actitud proecológica.

Palavras clave:
Protección ambiental; identidad social; actitudes ecológicas; valoración antártica; compromiso ambiental

Abstract

The research is interested in both ecological and identity (social) variables involved in increasing environmental commitment to Antarctic care. Two studies with inhabitants of two cities in the extreme south, and another with a national sample from three different geographical areas (north, center and south) participated by answering a self-administered survey. The instruments measured the perception of personal responsibility for Antarctic care in the present and future, Value of Antarctica, Antarctic regional ecological identity, and environmental beliefs. The core results show that identification with the Antarctic territory is important in determining the perception of responsibility and commitment to its care, and that this process is mediated by the value given to the polar continent. This mediation was observed in both the sample of locals and nationals. These results are discussed in relation to the importance of considering identity variables when developing models that aim to promote a pro-ecological attitude.

Keywords:
Environmental protection; social identity; ecological attitudes; Value of Antarctica; environmental commitment

Resumo

A pesquisa está interessada tanto nas variáveis ecológicas quanto nas variáveis de identidade (sociais) envolvidas no aumento do envolvimento ambiental no cuidado antártico. Dois estudos com habitantes do sul de duas cidades, e outro com uma amostra nacional de três áreas geográficas diferentes (norte, centro e sul) participaram respondendo a uma pesquisa auto-administrada. Os instrumentos mediram a percepção de responsabilidade pessoal pelos cuidados antárticos no presente e no futuro, a valorização antártica, a identidade ecológica regional antártica e as crenças ambientais. Os resultados centrais mostram que a identificação com o território antártico é importante para determinar a percepção de responsabilidade e o compromisso com seu cuidado, e que este processo é mediado pelo valor colocado no continente congelado. Tal mediação foi observada tanto na amostra de locais como de nacionais. Estes resultados são discutidos em relação à importância de considerar as variáveis de identidade ao desenvolver modelos destinados a promover uma atitude pró-ecológica.

Palavras-chave:
Proteção ambiental; identidade social; atitudes ecológicas; apreciação antártica; compromisso ambiental

Introducción

La Antártica es un territorio de interés global por sus recursos potenciales lo que ha conducido a las naciones a acordar tratados internacionales con el fin de protegerla (SHAH, 2015SHAH, R. M. Public Perceptions of Antarctic Values: Shaping Future Environmental Protection Policy. Procedia - Social and Behavioral Sciences, 168, 211-218, 2015.), aunque no ha podido ser resguardada por completo del daño ambiental que aqueja a nuestro planeta. Hoy resulta evidente que parte importante del deterioro ambiental es de origen antropogénico (PEREVOCHTCHIKOVA, 2013PEREVOCHTCHIKOVA, M. La evaluación del impacto ambiental y la importancia de los indicadores ambientales. Gestión y política pública, 22(2), 283-312, 2013.). Cambiar esta realidad exige comprender cómo la actitud de protección y cuidado del ambiente natural puede desarrollarse y/o mantenerse en el tiempo.

Son numerosos los modelos diseñados desde la psicología que intentan explicar, describir y predecir la realización de conductas responsables con el medio ambiente (GROB, 1995GROB, A. A structural model of environmental attitudes and behavior. Journal of Environmental Psychology, 15(3), 209-220, 1995.; CORRAL-VERDUGO, 1996CORRAL-VERDUGO, V. A structural model of reuse and recycling in Mexico. Environment and Behavior, 28(5), 665-696., 1996.; SCHULTZ; ZELEZNY, 1999SCHULTZ, P.W.; ZELEZNY, L. Values as predictors of environmental attitudes: Evidence for consistency across 14 countries. Journal of Environmental Psychology, 19(3), 255-265, 1999.; STERN, 2000STERN, P. C.; DIETZ, T.; ABEL, T.; GUAGNANO, G. A.; KALOF, L. (1999). A value-belief-norm theory of support for social movements: The case of environmentalism. Human Ecology Review, 6(2), 81-97, 2000.). Uno de ellos es la teoría del valor, que trata de las normas y las creencias hacia el medio ambiente (STERN, 2000; STERN; DIETZ; ABEL; GUAGNANO; KALOF , 1999). Este modelo comparte con los demás el postulado de que las actitudes y la intención de actuar tienen una importante influencia sobre el comportamiento cuando otros factores no impiden que éste se lleve a cabo (TAYLOR; TODD, 1995TAYLOR, S.; TODD, P. An integrated model of waste management behavior. Atest of household recycling and composting intentions. Environment and Behavior, 27(5), 603-630, 1995. DOI: 10.1177/0013916595275001
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).

En todos los modelos, se plantea que los individuos solo realizan conductas ambientalmente responsables cuando están suficientemente informados sobre la problemática ambiental, se encuentran motivados hacia ella y se ven capaces de generar cambios cualitativos (ÁLVAREZ; VEGA, 2009ÁLVAREZ, P.; VEGA, P. Actitudes ambientales y conductas sostenibles. Implicaciones para la educación ambiental. Revista de Psicodidáctica, 14(2), 245-260, 2009.). La teoría del valor plantea que las personas que valoran otras especies estarán altamente preocupadas por el medio ambiente y las condiciones que las amenazan. Las personas estarán más preocupadas por las condiciones ambientales que amenazan su salud o su bienestar (STERN; DIETZ; GUAGNANO, 1996).

Las correlaciones entre actitudes proambientales (preocupación por los problemas ambientales) y conductas ecológicamente responsables son, en general, muy bajas (AMÉRIGO; GONZÁLEZ, 1996AMÉRIGO, M.; GONZÁLEZ, A. Preocupación medioambiental en una población escolar. Revista de Psicología Social Aplicada, 6(1), 75-92, 1996.). Esto ha conducido a plantear que una alta concientización respecto del medio ambiente no asegura la puesta en práctica de comportamientos ecológicos responsables (GONZÁLEZ, 2003). La conducta puede verse afectada por el compromiso y la percepción personal, por los costos personales y beneficios de acciones particulares (KATZEV; JOHNSON, 1987KATZEV, R.D.; JOHNSON, T.R. Antecedent communications: Prompts.(Chapter2). Promoting Energy Conservation: An Analysis of Behavioral Research. Boulder, CO: West view Press, 1987.), así como por creencias y normas personales específicas de comportamiento (BLACK; STERN; ELWORTH, 1980). En otros términos, no es suficiente que la persona esté informada de la necesidad de actuar para proteger el medio ambiente, ni que sienta preocupación o comprenda la necesidad de que existan cambios. Se requiere que el individuo se identifique a sí mismo como quién debe actuar para resolver o aportar en la resolución del problema ambiental.

La percepción de que se es responsable del cuidado y protección de la Antártica podría ser comprendido como un comportamiento de autoatribución de que existe una obligación o deber implícito que recae en el individuo. Para medir este grado de responsabilidad percibida se consideran tareas de diferente orden, desde acciones sociales, políticas, hasta científicas y ambientales, las que pueden manifestarse tanto en el presente como en su proyección futura. Es una intención de comportamiento por lo que es sólo parcialmente predictiva de la conducta que se ejercerá finalmente, y señala un compromiso simbólico de querer actuar (AJZEN; FISHBEIN, 1980AJZEN, I.; FISHBEIN, M. Understanding attitudes and predicting social behavior. Englewood Cliffs, New Jersey: Prentice-Hall, 1980.). El compromiso futuro, además, suele estar condicionado por la falacia o sesgo de la planificación que establece que resulta difícil evaluar las reales implicancias de un compromiso cuando éste se hará efectivo en el largo plazo (LOVALLO; KAHNEMAN, 2003LOVALLO, D.; KAHNEMAN, D. Delusions of success. Harvard Business Review, 7, 56-63.10.5194/nhess-12-1029-2012, 2003.). Por esto es posible hipotetizar, que la percepción de responsabilidad tenderá a ser mayor en el futuro porque la evaluación de los elementos que tendrán que estar disponibles para actualizar esta intención de comportamiento, son difíciles de evaluar en el presente.

Respecto al cuidado de la Antártica y el valor que se le atribuye, este no es necesariamente consensual dadas las diferentes concepciones que los individuos y naciones confieren a este territorio. A este problema responde el concepto de “Valoración Antártica”. McLean y Rock (MCLEAN; ROCK , 2016MCLEAN, L.; ROCK, J. The importance of Antarctica: assessing the values ascribed to Antarctica by its researchers to aid effective climate change communication. Polar Journal, 6(2), 291-306, 2016.) usaron un modelo para identificar cuáles son las características más valoradas de la Antártica. Estas autoras consideran siete cualidades que definen a la Antártica como: Un componente en el sistema climático de la Tierra, uno de los últimos grandes desiertos del mundo, un laboratorio científico para el beneficio de la humanidad, un destino turístico, una reserva de recursos minerales que podría apoyar a la sociedad en el futuro, un importante hábitat para la vida salvaje y como un componente esencial de la historia de la exploración humana. Por otro lado, Liggett y Hemmings (2013LIGGETT, D.; HEMMINGS, A. D. Exploring Antarctic Values: Proceedings of the Workshop: Exploring Linkages Between Environmental Management and Value Systems: the Case of Antarctica. University of Canterbury, Christchurch, New Zealand (5 December 2011), 2013.) postulan que la Valoración Antártica está compuesta por seis tipos de valores: En primer lugar, el Valor Ambiental, que alude al grado de apreciación de la Antártica como territorio natural grandioso, que no tiene comparación. El Valor Social, que refiere a la conexión histórica con dicho territorio que se traduce en que es posible sentirse conectado con él, constituyéndose como parte de la identidad nacional. El Valor Político, alude a la convivencia pacífica de las naciones en su encuentro en el territorio antártico. El Valor Estético, entendido como su valía debido a la idílica composición de su paisaje. El Valor Económico, referida al provecho potencial de la explotación de recursos naturales con el objetivo de obtener beneficios comerciales. Por último, el Valor Científico que apunta a las potenciales investigaciones de diferentes ámbitos que serían posibles gracias a los recursos existentes en la Antártica. Este modelo valórico es más específico que el anterior y permite observar valores asociados al individuo, a lo humano y a lo natural. Estudios sobre población general indican que no todos los grupos asignan los mismos valores a lo antártico. Algunos consideran más valiosa la Antártica por su ecosistema y paisajes naturales (POWELL; RAMSHAW; OGLETREE; KRAFTE, 2016POWELL, R. B.; RAMSHAW, G. P.; OGLETREE, S. S.; KRAFTE, K. E. Can heritage resources highlight changes to the natural environment caused by climate change? Evidence from the Antarctic tourism experience. Journal of Heritage Tourism, 11(1), 71-87, 2016. DOI: https://doi.org/10.1080/1743873X.2015.1082571.
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), otros por ser una potencial fuente de recursos naturales y un componente importante del sistema climático del planeta (PEDEN; TIN; PERTIERRA; TEJEDO; BENAYAS, 2016PEDEN, J.; TIN, T.; PERTIERRA, L. R.; TEJEDO, P.; BENAYAS, J. Perceptions of the Antarctic wilderness: views from emerging adults in Spain and the United States. Polar Record, 52(5), 541-552, 2016. DOI: https://doi.org/10.1080/2154896X.2018.1541564.
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).

Aunque la Antártica está a una gran distancia de centros urbanos, esto no impide que las personas la consideren valiosa y parte de su identidad personal1. La noción de Identidad Regional se ha ido configurando, teniendo como referencia la teoría de la identidad social (TAJFEL, 1984TAJFEL, H. Intergroup relations, social myths and social justice in social psychology. The social dimension, 2, 695-715, 1984.; ZUÑIGA; ASÚN, 2003ZUÑIGA, C.; ASÚN, R. Identidad regional en un contexto de cambio: un estudio en La Araucanía. Revista de psicología política, 26, 73-92, 2003.). En la teoría, el concepto de identidad social correspondería a una parte del autoconcepto de un individuo que implica el conocimiento de su pertenencia a un grupo social, y que conlleva un significado valorativo y emocional asociado a esta pertenencia. En otros términos, sería la parte de lo que somos que se construye porque nos sentimos “apegados” a un grupo, categoría social o territorio. Cuando se trata de un territorio hablamos de identidad regional. Puede definirse como sentirse parte de un grupo humano que habita un determinado territorio, el cual tiene una referencia histórica en común y una continuidad sociocultural (ZUÑIGA; ASÚN, 2003). Muchas personas tienden a entregar su lealtad y sus afectos a entidades geográficas poseedoras de una historia, un paisaje y un modo de vida homogéneo (SALAZAR, 1996SALAZAR, J. M. Identidad social e identidad nacional. En J. F. Morales D. Páez; J. C. Deschamps, Identidad Social. Aproximaciones psicosociales a los grupos y a las relaciones entre grupos. Valencia: Promolibro, 1996, p.495-515.). La identidad regional es la imagen que los individuos y los grupos de una región moldean en sus relaciones con otras regiones, y el proceso de construcción social de esta identidad surge de las interacciones que los miembros de un territorio local tienen con los de fuera y que sirven para definir a la región (SALAZAR, 1996). Estudios previos, relativos al territorio antártico, muestran que habitantes de una de las ciudades puertas antárticas, se sienten identificados con este territorio, aunque no tienen ni han tenido un contacto directo con él. Desde perspectiva, cabría esperar que sea considerado un territorio valioso también por su significado identitario (Tajfel, 1979TAJFEL, H. Individuals and Groups in Social-Psychology. British Journal of Social and Clinical Psychology, 18, 183-190, 1979.). Este valor, no necesariamente construye una única actitud hacia ese entorno natural, sino que puede ser un factor de desarrollo de actitudes y creencias ambientales de diferente orden.

Las creencias ambientales hacen referencia a la actitud que poseen las personas respecto a las razones por las cuales se debe cuidar el medio ambiente y considera las consecuencias que el deterioro ambiental puede tener para sí mismo, para los seres humanos en general y para la biósfera (STERN; DIETZ, 1994STERN, P. C.; DIETZ, T. The value basis of environmental concern. Journal of social issues, 50(3), 65-84, 1994.; THOMPSON; BARTON, 1994THOMPSON, S. C. G,; BARTON, M. A. Ecocentric and anthropocentric attitudes toward the environment. Journal of environmental Psychology, 14(2), 149-157, 1994.).

Amérigo et al. (AMÉRIGO; ARAGONÉS; DE FRUTOS; SEVILLANO; CORTÉS, 2007AMÉRIGO, M.; ARAGONÉS, J. I.; DE FRUTOS, B.; SEVILLANO, V.; CORTÉS, B. Underlying dimensions of ecocentric and anthropocentric environmental beliefs. The Spanish Journal of Psychology, 10(1), 97-103, 2007.) postulan la existencia de un paradigma tripartito compuesto de creencias antropocéntricas referida a las creencias antropocéntricas (que refieren a la naturaleza como un bien en la vida del ser humano al servicio de sus necesidades), el egobiocentrismo (la importancia de lo natural dado el efecto beneficioso del contacto con el medio ambiente) y el bioesferismo (relativo a la importancia de la naturaleza en sí misma).

Respecto a la relación entre estas creencias y variables sociodemográficas y psicológicas, investigaciones recientes reportan resultados interesantes relativos a la edad, género y nivel educacional entre otras. La edad muestra asociaciones positivas con el sentimiento de cuidar la naturaleza (AMÉRIGO; GONZÁLEZ, 1996AMÉRIGO, M.; GONZÁLEZ, A. Preocupación medioambiental en una población escolar. Revista de Psicología Social Aplicada, 6(1), 75-92, 1996.; MOYANO-DIAZ; CORNEJO; GALLARDO, 2011MOYANO-DIAZ, E.; CORNEJO, F. A.; GALLARDO, I. Environmental Beliefs and Behavior, Economic Liberalism and Happiness. Acta Colombiana de Psicología, 14(2), 69-77, 2011.; MOYANO-DÍAZ; PALOMO-VÉLEZ; OLIVOS; SEPÚLVEDA-FUENTES, 2017). Sin embargo, estudios en jóvenes que han sido expuestos a formación específica sobre la temática, señalan la presencia de una orientación a preocuparse por la naturaleza actuando a favor de su cuidado (PALAVECINOS; AMÉRIGO; ULLOA; MUÑOZ, 2016PALAVECINOS, M.; AMÉRIGO, M.; ULLOA, J. B.; MUÑOZ, J. Preocupación y conducta ecológica responsable en estudiantes universitarios: estudio comparativo entre estudiantes chilenos y españoles. Psychosocial Intervention, 25(3), 143-148, 2016.). Con respecto al género, las investigaciones apuntan a que las mujeres tienden a reportar más preocupación ambiental que los hombres (ZELEZNY; CHUA; ALDRICH, 2000ZELEZNY, L. C.; CHUA, P. P.; ALDRICH, C. New ways of thinking about environmentalism: Elaborating on gender differences in environmentalism. Journal of Social Issues, 56(3), 443-457, 2000.; XIAO; MCCRIGHT, 2012XIAO, C.; MCCRIGHT, A. M. Explaining gender differences in concern about environmental problems in the United States. Society & Natural Resources, 25(11), 1067-1084, 2012.). También el interés en el cuidado de la naturaleza se vincula con un mayor nivel educacional (SCOTT; WILLITS, 1994SCOTT, D.; WILLITS, F. K. Environmental attitudes and behavior: A Pennsylvania survey. Environment and behavior, 26(2), 239-260, 1994.; GÓMEZ; NOYA; PANIAGUA, 1999GÓMEZ, C.; NOYA, F.J.; PANIAGUA, A. Actitudes y comportamientos hacia el medioambiente en España. Madrid: Centro de Investigaciones Sociológicas (CSIC), 1999.; MEYER, 2015MEYER, A. Does education increase pro-environmental behavior? Evidence from Europe. Ecological economics, 116, 108-121, 2015.), e ideología política (MOYANO-DÍAZ; PALOMO-VÉLEZ; OLIVOS; SEPÚLVEDA-FUENTES, 2017). El estatus socioeconómico (ARAGONÉS; AMÉRIGO, 1991ARAGONÉS, J. I.; AMÉRIGO, M. Un estudio empírico sobre las actitudes ambientales. Revista de Psicología Social, 6(2), 223-240, 1991.; VAN LIERE; DUNLAP, 1981VAN LIERE, K. D.; DUNLAP, R. E. Environmental concern: Does it make a difference how it’s measured? Environment and behavior, 13(6), 651-676, 1981.) y lugar de residencia (VAN LIERE; DUNLAP, 1981) también fueron estudiados pero su influencia sobre la realización de conductas proambientales no es concluyente. En su conjunto, eso sí, estas variables logran explicar una porción muy pequeña del fenómeno.

En cuanto a las variables psicosociales que se relacionan con el cuidado de la naturaleza, Hines et al. (HINES; HUNGERFORD; TOMERA, 1987HINES, J. M.; HUNGERFORD, H. R.; TOMERA, A. N. Analysis and synthesis of research on responsible environmental behavior: A meta-analysis. The Journal of environmental education, 18(2), 1-8, 1987. http://dx.doi.org/10.1080/00958964.1987.9943482.
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) identifica el sentido de la responsabilidad (quienes perciben ser responsables cuidan más), locus de control (el interno favorece la orientación a la protección de la naturaleza), conocimiento del tema (tener información aumenta el compromiso), conocimiento de conductas proambientales (el conocer las acciones a realizar aumenta su actualización), compromiso verbal (en particular cuando este implica la declaración pública de una actitud) y actitudes hacia el medio ambiente o la ecología (creer en su importancia e impacto). Factores psicosociales que se refieren a valores como antropocentrismo - ecocentrismo (THOMPSON; BARTON, 1994THOMPSON, S. C. G,; BARTON, M. A. Ecocentric and anthropocentric attitudes toward the environment. Journal of environmental Psychology, 14(2), 149-157, 1994.) y grado de responsabilidad personal (HWANG; KIM; JENG, 2000HWANG, Y. H.; KIM, S. I.; JENG, J. M. Examining the causal relationships among selected antecedents of responsible environmental behavior. The journal of environmental education, 31(4), 19-25, 2000.; SANTOS; GARCÍA-MIRA; LOSADA, 1998SANTOS, M. C.; GARCÍA-MIRA, R.; LOSADA, M. D. Relación de las variables locus de control y autoestima con las actitudes hacia el medio ambiente. En J.M. Sabucedo, R. GARCÍA-MIRA; E. ARES; D. PRADA (Eds.), Medio ambiente y responsabilidad humana. Aspectos sociales y ecológicos A Coruña: Tórculo. p. 281-288, 1998.), han sido considerados fuertes predictores de la actitud ambiental y, por consiguiente, de los comportamientos ambientales responsables (GROB, 1996; VINING; EBREO, 1990VINING, J. ; EBREO, A. What’s makes a recycler? A comparison of recyclers and non recyclers. Environment and Behavior, 22, 1: 55 - 73, 1990.). En cuanto a los factores cognitivos, referidos a los conocimientos sobre el medio ambiente (HINES; HUNGERFORD; TOMERA, 1987; KAISER; WÖLFING; FUHRER, 1999KAISER, F. G.; WÖLFING, S.; FUHRER, U. Environmental attitude and ecological behaviour. Journal of Environmental Psychology, 19(1), 1-19, 1999. https://doi.org/10.1006/jevp.1998.0107.
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), resultados hallados por Hwang y et al. (HWANG; KIM; JENG, 2000HWANG, Y. H.; KIM, S. I.; JENG, J. M. Examining the causal relationships among selected antecedents of responsible environmental behavior. The journal of environmental education, 31(4), 19-25, 2000.) señalan que el conocimiento sobre el medio ambiente, así como el grado de adscripción de responsabilidad de la persona ante la conducta, no eran causas suficientes para la realización de conductas proambientales, pero si aportaban significativamente. No existen, eso sí, estudios que vinculen aspectos identitarios en la comprensión de las actitudes proambientales.

Entonces, qué variables identitarias y actitudinales contribuyen al desarrollo de la percepción de que se es responsable del cuidado antártico. La propuesta del presente estudio es que la identificación con lo antártico debiese manifestarse en una mayor valoración de dicho territorio e impactar en la autoasignación de responsabilidad. De esta temática se ocupan ambos estudios, uno en una muestra de localidades australes y otra con una muestra nacional que permite una primera comparación del fenómeno en territorios más y menos distantes geográficamente.

Estudio 1

El estudio tuvo como objetivo medir la valoración del territorio antártico, la adhesión a distintos valores vinculados a él y la relación con otras variables tales como la percepción de responsabilidad presente y futura, la identidad regional antártica y las creencias ecológicas, efectuando una comparación entre las distintas ciudades de la Región de Magallanes y la Antártica Chilena (ciudad capital, ciudad austral, otras ciudades). La predicción a la base es que la identificación con el territorio conduce a la percepción de responsabilidad mediado por un aumento en la valoración de lo antártico como efecto del sesgo endogrupal.

Método

Participantes

Participaron un total de 253 personas seleccionadas mediante muestreo no aleatorio accidental. El criterio de inclusión fue residir en una de las ciudades de la Región de Magallanes y Antártica Chilena (66,3% en ciudad capital, 33,7% ciudad austral). El rango de edad de los participantes fue de 18 a 81 años (M = 37,20; DT = 13,68). El 55,8% fueron mujeres, mientras que el 44,2% restante fueron hombres. Se utilizó un diseño no experimental transversal correlacional.

Instrumentos

Variables Antárticas:

  • - Escala de Percepción de Responsabilidad Personal Presente y Futuro: Escala compuesta de 12 afirmaciones que se orientan a determinar la percepción del rol que, como miembro de una comunidad regional, le cabe en la protección, desarrollo y/o uso de los recursos naturales del territorio antártico. Se responde señalando el grado percepción de involucramiento (1: Nada a 5: Totalmente). La confiabilidad de la escala Rol Presente fue de .94 (Alfa) y de la escala Rol Futuro fue de .93 (Alfa).

  • - Escala de Valores Antárticos: Esta escala, compuesta de 17 ítems, mide la adhesión (importancia: (1) de Nada a (5) Totalmente) a valores asociados consensualmente con la antártica tales como: el ambiental, social, político, estético, económico y el científico según el modelo de Ligeett y Hemmings (LIGGETT; HEMMINGS, 2013LIGGETT, D.; HEMMINGS, A. D. Exploring Antarctic Values: Proceedings of the Workshop: Exploring Linkages Between Environmental Management and Value Systems: the Case of Antarctica. University of Canterbury, Christchurch, New Zealand (5 December 2011), 2013.).La confiabilidad para esta muestra fue de .92 (Alfa).

  • - Escala de Identidad Regional Ecológica Antártica (SANTANA; CARRASCO; ESTRADA, 2013SANTANA, D.; CARRASCO, H.; ESTRADA, C. La Identidad Regional Ecológica: el rol del entorno ambiental en la construcción de la identidad patagónica. Estudios de Psicología, 34(1):83-88, 2013. DOI:10.1174/021093913805403101.
    https://doi.org/10.1174/0210939138054031...
    ): Se constituye de un total de 10 afirmaciones que miden la identificación con el entorno ambiental antártico, que se responden sobre una escala señalando el nivel de acuerdo con las afirmaciones. La confiabilidad para esta muestra fue de .93 (Alfa).

Variables Ecológicas:

  • - Escala de Creencias Ambientales (ARAGONÉS; AMÉRIGO, 1991ARAGONÉS, J. I.; AMÉRIGO, M. Un estudio empírico sobre las actitudes ambientales. Revista de Psicología Social, 6(2), 223-240, 1991.): la cual esta reformulada de la escala de Thompson y Barton (1994THOMPSON, S. C. G,; BARTON, M. A. Ecocentric and anthropocentric attitudes toward the environment. Journal of environmental Psychology, 14(2), 149-157, 1994.), y tiene como objetivo medir las creencias sobre las problemáticas medioambientales, esta escala posee tres dimensiones internas, las cuales se denominan antropocéntrica, bioesférica y egocéntrica. Constituida por un total de 15 afirmaciones, las cuales se responden señalando el nivel de acuerdo con las afirmaciones. La confiabilidad para la muestra de la dimensión Antropocéntrica fue de .79 (Alfa), para la dimensión Bioesférica fue de .57 (Alfa) y para la dimensión Egocéntrica fue de .77 (Alfa)

Procedimiento

Se aplicaron dos modalidades para la recolección de datos. La participación fue voluntaria, previamente se solicitó la lectura y firma de un consentimiento informado, en el caso de formato físico. La participación en el formato digital vía online, solicita al participante leer previamente el consentimiento informado y marcar si está de acuerdo o no en continuar con las preguntas. Los instrumentos fueron autoaplicados y se contestaron las consultas durante el proceso. Al finalizar se les agradeció a los participantes.

Resultados

Tal como muestra la tabla 1, la adhesión a los valores antárticos fue alta (superando el punto teórico neutro de la escala) así como también la Identidad Regional Antártica y la responsabilidad que sienten con la protección de la Antártica en el presente y en el futuro. Respecto a las variables ecológicas tanto las creencias Egocéntrica como las Biocéntricas resultaron altas mientras que Antropocéntrica fue neutra (ni de acuerdo ni en desacuerdo). Es decir, los participantes que valoran la Antártica, la reconocen como algo importante para su identidad y se sienten responsables de su cuidado (ver tabla 1).

Al evaluar el valor atribuido a lo antártico, el promedio más alto es el de Valor Estético, seguido por el científico y el ambiental. El promedio menor fue para el valor político, aunque éste, al igual que los otros, mostró un alto acuerdo (superior al punto neutro).

Tabela 1
Descriptivos y correlaciones de las variables del estudio 1 y 2.

Al comparar la ciudad capital con la ciudad austral le dan un menor valor político y económico, y un mayor valor estético y ambiental a la Antártica. Se le da relevancia al valor en general a la Antártica tanto en la ciudad contigua como en la ciudad capital. (Ver tabla 2).

Con respecto a la Valoración Antártica, se observa una relación positiva tanto con la Identidad Regional Antártica como con la Identidad Regional Magallánica. Mientras más se valora la antártica también se considera que el entorno físico de la Región y del territorio Antártico, son valiosas para la identidad y, viceversa. También se observaron asociaciones positivas con el compromiso de cuidado de la antártica y con las tres creencias ecológicas (ver tabla 1).

Se realizó una regresión con Compromiso presente como variable dependiente, y con Identidad Regional Antártica, Valoración Antártica y las Creencias Ecológica, Antropocéntrica, Egocéntrica y Biocéntrica, como variables predictoras. El modelo explica un 41% de la varianza (r 2 = .41), (F (6,230) = 27.34, p = .001). La variable Identidad Regional Antártica(β = .36, p = .001, 95%IC[.23, .52]) es la que resulta más explicativa, seguida de Identidad Regional (β = .26, p = .001, 95%IC[.14, .41]),Valoración Antártica (β = .22, p = .001, 95%IC[.14, .50]) y Creencia Biocéntrica (β = -.17, p = .02, 95%IC[-.48, -.04]). Las Creencias Antropocéntrica y Egocéntrica no resultaron explicativas.

Como se expone en la figura 1, el modelo causal que explica el compromiso con el cuidado de la Antártica a partir de la identificación con dicho territorio (IRA) en la que actúa como mediador la valoración del territorio antártico, resulta significativo (β = .62, p < .001). El efecto directo de la Identidad Regional Antártica sobre la responsabilidad percibida en el territorio antártico se ve reducido cuando se incluye la adhesión a los valores antárticos confirmando la existencia de un efecto indirecto, R 2 = .37, F (2,236) = 69,18, p < .0001.

Tabla 2
Descriptivos y comparaciones del valor antártico por zona (austral / Capital)

El análisis Bootstrap muestra un efecto indirecto de la valoración del territorio antártico en la responsabilidad percibida, que aumenta con la inclusión del mediador, β = .08, DS = .03, 95%[.03, .15]. La identificación con el territorio antártico aumenta la valoración que se tiene de dicho territorio y esto, a su vez, aumenta el compromiso en su protección y cuidado.

Figura 1
Efecto de la identificación con lo antártico en el compromiso con el cuidado del territorio mediado por el valor global atribuido

Discusión

El objetivo de este estudio fue establecer la relación entre la intención de actuar como un custodio antártico y variables tanto identitarias como ecológicas, en muestras de dos ciudades “puerta antártica”. El resultado principal indica que el compromiso con el cuidado antártico es explicado principalmente por la identificación con dicho territorio y la valoración que se le atribuye al mismo. Esta combinación entre identificación y valoración es predicha por la teoría de Tajfel (TAJFEL, 1979TAJFEL, H. Individuals and Groups in Social-Psychology. British Journal of Social and Clinical Psychology, 18, 183-190, 1979.) que establece que cuando alguien se identifica con algo y lo reconoce como parte de lo que es, aumenta el valor porque esto se constituye en un aspecto la autoestima grupal y, como consecuencia, del propio valor. Es decir, si lo considero parte de mí, entonces lo valorizo. Las diferencias observadas entre las dos localidades que indican que la más cercana geográficamente, muestra una mayor identificación, podría deberse a que se trata de una localidad más pequeña y aislada relativamente (conexión marítima y aérea). Tal como lo reporta la literatura, los grupos pequeños suelen generar las condiciones óptimas de identificación que no compromete la individuación de cada miembro por lo que suelen mostrar mayores niveles de identificación (BREWER, 2003BREWER, M.B. Optimal distinctiveness, social identity, and the self. In M.R. LEARY; J. P. TANGNEY (Eds.), Handbook of self and identity. New York, NY: Guilford Press, 2003, p. 480-491). De esta forma, aunque ambos grupo le otorgan a la Antártica un valor intrínseco asociado a su identidad social, esta resulta más intensa en aquel grupo de tamaño menor (1% de población). Otra posible explicación, está el hecho de que los miembros de los grupos pequeños tienden a soportar mejor la alta cohesión lo que puede conducir a una mayor identificación. Sin embargo, esto podría ser aún mayor debido a que en la ciudad austral gran porcentaje de los habitantes provienen de otras ciudades y no son autóctonos de dicha localidad. A estos últimos, se les podría atribuir un mayor sentido de responsabilidad e identificación con su entorno ya que su valoración ha sido traspasada culturalmente por generaciones (HAGSTROM; SELVIN, 1965HAGSTROM, W. ; SELVIN, H. C. Two dimensions of cohesiveness in small groups. Sociometry, 28, 30-43, 1965.).

Un resultado interesante respecto a las variables ecológicas fue que la creencia biocéntrica es la única que resultó explicativa de la orientación hacia la generación de una actitud de cuidado de lo antártico. Esta creencia dicta que a la naturaleza se le considera valiosa por sí misma lo que promulgaría una responsabilidad ante esta, generando conductas menos invasivas y sustentables con el entorno. Se pretende cuidar el medio ambiente porque es el lugar donde habitamos por lo que es nuestro trabajo custodiarlo. Es así, que este resultado puede asociarse con una mayor identificación con el entorno, ya que la creencia biocéntrica nos hace encausar nuestros pensamientos hacia actitudes proambientales que permitan una coexistencia sustentable entre las personas y la naturaleza. Estudios previos mostraron que una muestra de científicos antárticos mostraba niveles altos de antropocentrismo debido a la relación funcional que implica el trabajo que realizan. Aparentemente, la población general de la zona austral parece mostrar una relación, desde una perspectiva ecológica, más idealizada lo que se reafirma en el fuerte valor estético que se le asigna a dicho territorio (LATORRE; JALIL; HECHENLEITNER; LÓPEZ; CABANAS; ESTRADA, s/f).

El rol de la valoración antártica como mediador entre la identidad social antártica y la disposición a convertirse en custodio de dicho territorio, resulta significativa, indicando que el sentirse identificado con el territorio antártico influye en la valoración que otorgamos a dicho territorio, lo que genera en las personas un mayor sentimiento de responsabilidad, conduciendo a un mayor compromiso con el territorio antártico. Esta primera investigación sienta las bases para considerar las variables no ecológicas, vinculadas con la identidad social como relevantes para comprender la intención de comportamiento custodio. La pregunta inicial pendiente es si esta relación es exclusiva de esta población o un fenómeno más global que podría entenderse como teóricamente relevante. De esta temática se ocupa el estudio 2.

Estudio 2

El presente estudio tiene como objetivo medir la valoración hacia el territorio antártico, la adhesión a distintos valores vinculados a él, y la relación con otras variables tales como la percepción de responsabilidad presente y futura, la identidad regional antártica, y las creencias ecológicas, comparando a los locales con una muestra inicial representando a tres zonas del país: zona norte, zona centro y zona sur.

Método

Participantes

Participaron un total de 180 personas seleccionadas mediante muestreo no aleatorio accidental. El criterio de inclusión fue ser chileno y vivir en una zona geográfica diferente a la región sur austral. El rango de edad de los participantes fue de 18 a 69 años, (M = 27,06; DE = 12,2). El 60% fueron hombres, mientras que el 40% restante fueron mujeres. Todos ellos habitan en el país. Se utilizó un diseño similar al estudio 1

Instrumentos:

Variables Antárticas:

  • - Escala de Percepción de Responsabilidad Personal Presente y Futuro: Para esta muestra, la confiabilidad de la escala Rol Presente fue de .88 (Alfa) y de la escala Rol Futuro fue de .91 (Alfa).

  • - Escala de Valores Antárticos18: La confiabilidad para esta muestra fue de .92 (Alfa).

  • - Escala de Identidad Regional Ecológica Antártica44: La confiabilidad para esta muestra fue de .92 (Alfa).

Variables Ecológicas:

  • - Escala de Creencias Ambientales37: La confiabilidad para esta muestra de la dimensión Antropocéntrica fue de .80 (Alfa), para la dimensión Bioesférica fue de .59 (Alfa) y para la dimensión Egocéntrica fue de .79 (Alfa)

Procedimiento:

Se aplicaron dos modalidades para la recolección de datos, presencial y digital. La participación fue voluntaria, previamente se solicitó la lectura y firma de un consentimiento informado, en el caso de formato físico. La participación en el formato digital vía online, solicita al participante leer previamente el consentimiento informado y marcar si está de acuerdo o no en continuar con las preguntas. Los instrumentos fueron autoaplicados y se contestaron las consultas durante el proceso. Al finalizar se les agradeció a los participantes.

Resultados

Todas las variables del estudio mostraron promedios altos (sobre el punto neutro teórico de la escala), indicando que los participantes señalan asignar un alto valor a la Antártica, importancia a dicho territorio en la identidad social y sentimiento de responsabilidad respecto a su cuidado tanto en el presente como en el futuro. Las creencias ecológica, bioesférica y egocéntrica también resultaron altas mientras que la antropocéntrica se situó en la neutralidad (ni de acuerdo ni en desacuerdo), (ver tabla 1)

Los resultados de Escala de Valores Antárticos (VA) indica que el promedio más alto de adhesión de la muestra total fue al Valor Estético, seguido por el Valor Ambiental y luego el Valor Científico. El valor de menor promedio fue el Valor Económico, aunque igual que todos los anteriores, supera el punto neutro indicando alto acuerdo (Ver tabla 4). Al comparar el grupo de nacionales con el de población local, ambos le asignan un mayor valor estético y ambiental a la Antártica mientras que el valor político y económico son los menos reportados. Para aquellos en que los promedios resultados diferentes, los locales asignaron más valor (Ver tabla 3)

Los Locales mostraron una mayor identificación con la Antártica que los nacionales, pero estos últimos dicen sentir una mayor responsabilidad con la protección de la Antártica, tanto en el presente como en el futuro. (Ver tabla 4)

Tabla 3
Descriptivos del valor antártico (VA) por zona del estudio 2 y comparación con medias locales (ML )

La Valoración Antártica se relaciona de manera positiva tanto con la Identidad Regional Antártica como con la percepción de responsabilidad en su cuidado tanto en el presente y futuro. Las creencias Egocéntricas y Bioesféricas también muestran una relación positiva con el valor asignado a lo antártico, y viceversa. No existe, eso sí, relación con la Creencia antropocéntrica, indicando que el valor atribuido a la Antártica no se conecta con la idea de que debe ser útil para los seres humanos (Ver tabla 3)

Al regresar compromiso por el cuidado y protección de la Antártica - rol presente (VI) por Valoración Antártica, Identidad Regional Antártica y Creencias Ecológicas Egocéntrica, Bioesférica y Antropocéntrica, el modelo explica un 39% de la varianza, (r 2 = .39, F (5,167) = 21,09, p = .001).

La Valoración Antártica Total (β = .50, p = .001, 95%IC [.39, .70]) es la que resulta más explicativa seguida de las Creencias Antropocéntricas (β = .20, p = .004, 95%IC[.05, .24]). Entonces, la responsabilidad del cuidado y protección de la Antártica en el presente se ve aumentada cuando se adhiere al valor que se le otorga a lo Antártico y, cuando la idea de que debe ser útil para los seres humanos aumenta. Las otras variables del estudio no resultaron significativas para explicar el compromiso por el cuidado y protección de la Antártica en el grupo global de participantes.

Como se expone en la figura 2, el modelo propuesto de mediación simple en la que actúa como mediador la valoración antártica resulta significativo (β = .19, DS = .05, 95%[.10, .29]). El efecto directo de Identidad Regional Antártica sobre el Compromiso con el Cuidado Antártico se ve reducido cuando se incluye la valoración antártica como mediadora, confirmando la existencia de un efecto indirecto. Sentirse identificado con la Antártica aumenta la percepción de que esta es valiosa y esto, a su vez, aumenta el compromiso de cuidado de dicho territorio.

Figura 2
Efecto de la identificación con lo antártico en el compromiso con el cuidado del territorio mediado por el valor global atribuido en muestra nacional

Discusión

El objetivo de este segundo estudio fue medir las variables del estudio 1 pero en una muestra de población nacional para permitir una primera comparación. El resultado principal señala que a diferencia de los locales donde el compromiso con el cuidado antártico es explicado principalmente por la identificación con dicho territorio y participa la creencia biocéntrica respecto al medio ambiente, en el caso de los nacionales, la principal variable explicativa es el valor que se le atribuye a lo antártico junto a la creencia antropocéntrica. En otros términos, mientras para los locales lo identitario y el valor propio del medio ambiente antártico influencia el deseo de proteger a este territorio, en el caso de los nacionales, se define a partir de lo valiosa que se percibe la antártica y su importancia para satisfacer necesidades del ser humano. Existen estudios que indican que no todos los grupos asignan los mismos valores a lo antártico. Es así como, algunos consideran más valiosa la Antártica por su ecosistema y paisajes naturales19, otros por ser una potencial fuente de recursos naturales y aquellos que la creen un componente importante del sistema climático del planeta20. El rol de lo identitario parece indicar los locales tiene una visión menos instrumental que aquellos que se identifican menos con el territorio probablemente por su lejanía geográfica. La inexistencia de diferencias entre las tres zonas nacionales (norte, centro y sur no austral) podría explicarse en que la extensión territorial y las distancias entre estas zonas no les permiten sentirse identificados con dicho territorio. A pesar de la aproximación relativa de la zona sur (no austral) con la Antártica su distancia es cercana a los 4.535 km, por lo que no se observan diferencias con el resto de las zonas.

El rol de la valoración antártica como mediador entre la identidad social antártica y la disposición a convertirse en custodio de dicho territorio se replica en el caso de los nacionales. Valorar la Antártica se acompaña de estar dispuesto y comprometido a contribuir en acciones de cuidado y protección en el tiempo presente y futuro. Este resultado complementa el anterior que postula que es el fenómeno de la identificación social, que establece que sentirse parte de un grupo se encuentra directamente relacionado con el compromiso grupal y por lo tanto con la intención de aportar positivamente involucrándose en actividades que lo beneficien (ELLEMERS; KORTEKAAS; OUWERKERK, 1999ELLEMERS, N.; KORTEKAAS, P.; OUWERKERK, J. W. Self-categorisation, commitment to the group and group self-esteem as related but distinct aspects of social identity. European Journal of Social Psychology, 29 (2-3), 371-389, 1999.).

Discusión y Conclusión General

El objetivo general de esta investigación fue estudiar el rol de variables identitarias y ecológicas en el desarrollo de una actitud de cuidado y protección a lo antártico. Ambos estudios muestran resultados similares. El primero de ellos refiere a que los valores que tanto los locales como los nacionales otorgan a la antártica son principalmente de orden estético y ambiental. Esto parece indicar que la totalidad de los participantes del estudio le otorga importancia a dicho territorio por la belleza de su paisaje natural y a la vez como un bien precioso que debe ser protegido y custodiado probablemente como efecto de la continua exposición mediática a imágenes naturales de extraordinaria belleza. Es poco común la exposición de fotografías de contaminación o de aridez vinculadas a lo antártico.

Un segundo resultado también se replica en el estudio nacional e indica que identificarse con el territorio y considerarlo como parte de la propia identidad social, conduce a aumentar su valor percibido y, esto a su vez, aumenta la posibilidad de que se asuma la intención de una conducta responsable, de protección y cuidado. Esto podría explicarse en la vinculación entre identificación grupal y el consiguiente sesgo endogrupal24. La identificación comprende la responsabilidad grupal, es decir, el compromiso a actuar en beneficio del propio grupo. Si este grupo está conformado en torno a un territorio determinado, el valor atribuido a ese territorio resulta importante para la autoestima grupal e impulsa, necesariamente, el compromiso o intento de acción, por parte de los miembros del mismo(ELLEMERS; KORTEKAAS; OUWERKERK, 1999ELLEMERS, N.; KORTEKAAS, P.; OUWERKERK, J. W. Self-categorisation, commitment to the group and group self-esteem as related but distinct aspects of social identity. European Journal of Social Psychology, 29 (2-3), 371-389, 1999.).

En términos teóricos, estos resultados nos conducen a considerar variables no eclógicas para el desarrollo de modelos predictivos del comportamiento ecológico sustentable. En términos prácticos, este primer estudio permite considerar, en políticas públicas en esta dirección, elementos identitarios que podrían mejorar la efectividad de campañas de actitud proambiental.

Una de las limitaciones del estudio es de orden metodológica ya que la población seleccionada puede no haber considerado algunos grupos afectando su representatividad por lo que esta debiese ampliarse en otras investigaciones, en particular respecto a la muestra nacional. Además, los instrumentos utilizados son extensos y esto puede afectar la confiabilidad de algunos participantes.

Futuras investigaciones, además de ampliar la muestra nacional, debiese considerar grupos que hasta ahora han sido excluidos tales como la población no urbana, que puede haber desarrollado una relación identitaria probablemente diferente con lo antártico ya que su exposición a información sobre dicho territorio se encuentra limitada. Por otra parte, considerar población de origen autóctono, que ha tenido una vinculación histórica con lo antártico por su posición geográfica y que podría mostrar un perfil identitario y ecológico diferentes a los habitantes temporales o de primera generación. Además, resulta necesario incluir nuevas variables identitarias que puedan explicar, en tanto que moderadoras o mediadoras, el proceso de adherir a una mirada de custodia de lo antártico. De esta forma, se espera contribuir a comprender el rol de variables psicológicas grupales, que afectan lo ecológico y nuestra relación consecuente, con los territorios en los que vivimos o con los que nos sentimos identificado.

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Fechas de Publicación

  • Publicación en esta colección
    04 Nov 2022
  • Fecha del número
    2022

Histórico

  • Recibido
    31 Mar 2021
  • Acepto
    18 Abr 2022
ANPPAS - Revista Ambiente e Sociedade Anppas / Revista Ambiente e Sociedade - São Paulo - SP - Brazil
E-mail: revistaambienteesociedade@gmail.com