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Lectura, escritura y matemáticas como prácticas sociales: diálogos con américa latina

REVIEW

"Lectura, escritura y matemáticas como prácticas sociales: diálogos con américa latina"

Irán Guadalupe Guerrero Tejero

Estudiante del programa de doctorado del Departamento de Investigaciones Educativas del Centro de Investigación y Estudios Avanzados (Cinvestav) en México. Email: iranguerrero@gmail.com

Endereço para correspondência Endereço para correspondência: Laboratório de Educacion, Tecnologia y Sociedad DIE Cienvestav 54832-800 Ext. 1047 México D.F.

KALMAN, Judith. STREET, Brian (Org). Lectura, Escritura y Matemáticas como prácticas sociales: Diálogos desde los Estudios Latinoamericanos sobre Cultura Escrita. México: Siglo XXI, CREFAL (Centro de Cooperación Regional para la Educación de Adultos en América Latina y el Caribe), 2000. 420p.

Miguel Ángel joven mexicano, habitante de una comunidad urbana marginal expresa: "no tengo nada que decir", para indicar que usualmente tiene que leer en la escuela la experiencia de otros, más que escribir la suya. Marta, boliviana emigrada a Argentina, se compara con un ciego por no saber leer, mientras se desenvuelve en un mundo de trámites y documentos y luego cuestiona: ¡¿qué me empide a mí no saber leer y escribir?! Mario se declara analfabeta; es presidente de una asociación indígena en Brasil. Amen, un pakistaní que vende verduras afirma: "No he sido educado y no sé leer y escribir, pero eso no quiere decir que sea tonto y no tenga sabiduría".

Éstas son sólo algunas de las voces presentes en el libro Lectura, Escritura y Matemáticas como Práctica Sociales. Diálogos con América Latina, coordinado por Judith Kalman y Brian Street y publicado en 2009 por Siglo XXI y por el CREFAL1 1 Centro de Cooperación Regional para la educación de Adultos en América Latina y el Caribe. . A través de 19 capítulos, 21 autores de Argentina, Bolivia, Brasil, Estados Unidos, Inglaterra, México y Nueva Zelanda, enriquecen el campo de las prácticas sociales, los Nuevos Estudios de Cultura Escrita (NLS por sus siglas en inglés) y la sociolingüística. Esta diversidad de autores parece ser el mérito mayor de este libro; sin embargo, existen otros aportes que merecen relevarse.

El diálogo es un elemento posibilitador para pensar en nuevas teorizaciones sobre cultura escrita. Dicho diálogo es más que la mera conjunción de estos capítulos o el encuentro de dos lenguas, José Ramón Jouve en el epílogo plantea que es la construcción que surge a partir del encuentro de dos tradiciones conceptuales que no son ajenas, pero sí diferentes: los NLS procedentes de Europa y Estados Unidos, y los Latin American Literacy Studies (LALS), desarrollados por investigadores de América Latina. Construir un diálogo entre ambas además requiere, según Jouve, la "traducción inversa", es decir, no sólo la adaptación e importación de los términos de NLS a los estudios latinoamericanos, sino la construcción conjunta para enriquecer y ampliar el sistema epistemológico establecido "por y a partir de los NLS".

Además de representar un importante avance en ese sentido, este libro difunde nuevas direcciones en el campo de la cultura escrita; al problematizar nociones como literacy, literacies, culturas escritas, numeracy, alfabetización los autores muestran cómo este campo no es estático ni mucho menos universal. Por ejemplo, una de las direcciones sugeridas es el cuestionamiento de la escritura como única forma de representación y el uso de la categoría multimodalidad (Kress y Bezemer en este volumen) que retoman varios de los autores. El uso de otros modos de comunicación además de la escritura para representar significados no es nuevo, como lo ejemplifica el uso de los khipús2 2 Sistemas de cordeles que registraban datos de asuntos públicos. en los pueblos andinos al que refiere Niño-Murcia; perdura y también puede observarse en el uso de pailis y barajjas (recipientes para medir) que emplea la gente en India para hacer matemáticas en su vida cotidiana como lo refiere Baker, o en el uso de imagen, video e Internet que documenta McCaffery en la vida de los viajantes y los gitanos. Los autores muestran cómo los diferentes sistemas simbólicos atraviesan diversos contextos humanos y culturales y relevan la necesidad que las prácticas de cultura escrita y matemática sean redefinidas ante las condiciones sociales emergentes y cambiantes.

Los autores matizan los supuestos asumidos respecto a la alfabetización a través de la discusión teórica y del análisis de lo empírico; así, relevan los riesgos de visiones deterministas que muchas veces inducen políticas que estigmatizan a ciertos sectores de población bajo la etiqueta de "analfabetas", como muestra Cragnolino. Asimismo, los autores exponen la naturaleza social y culturalmente situada de los fenómenos estudiados; conceden voz a las personas y hacen que formen parte de un diálogo académico para problematizar conceptualizaciones sobre alfabetización y cultura escrita y destacar que los diseños unilaterales, fijos y con pretensiones homogeneizantes son insuficientes para enfrentar la diferencia y la diversidad de las sociedades. A través de la lectura de los capítulos podemos apreciar cómo los usos del lenguaje están condicionados por circunstancias sociales, políticas, culturales e históricamente constituidas, que van más allá del hablante. Mirar metodológicamente este vínculo, podría representar un aporte para dimensionar lo local y pensar en las posibilidades que ofrece; o contribuir a construir un puente entre la brecha que existe entre los micro análisis y las macro explicaciones.

Los 19 capítulos del libro se agrupan en tres secciones: 1) Discusiones teóricas actuales; 2) Cultura escrita y Matemáticas como prácticas sociales: perspectivas latinoamericanas; 3) Cultura escrita y Matemáticas como prácticas sociales: perspectivas internacionales.

En la primera sección, Nancy Hornberger en Voz y biliteracidad en la revitalización de lenguas indígenas: prácticas contenciosas en contextos quechua, guaraní y maorí, propone un modelo teórico de la biliteracidad para conceptualizar el uso de las lenguas indígenas como medio de enseñanza; argumenta la necesidad de activar la voz de los hablantes para la provitalización y no sólo el mantenimiento de las lenguas. Marildes Marinho en Nuevas alfabetizaciones en los procesos sociales de inclusión y exclusión analiza ejemplos provenientes de comunidades indígenas para sustentar cómo la noción de letramento puede reconciliar historias conceptuales y ser una herramienta para comprender fenómenos culturales, modos y condiciones en los que la sociedad brasileña enfrenta la escritura. Kress y Bezemer en Escribir en un mundo de representación multimodal señalan las implicaciones que tiene la multimodalidad en una pedagogía de la escritura y la escritura situada en marcos locales específicos; argumentan la necesidad de cambiar de enfoques, metáforas y orientación, como por ejemplo, transitar de escribir a confeccionar textos, o de componer a diseñar. Brian Street en Perspectivas etnográficas y políticas sobre cultura escrita: el poder de nombrar y definir analiza ejemplos de las culturas escritas "ocultas" en Pakistán, y evidencia cómo las maneras de nombrar y definir constituyen un componente crucial de la desigualdad; asimismo señala posibilidades para pensar en líneas de investigación relacionadas con enfoques etnográficos que posibiliten el desarrollo de políticas más acordes con los significados locales de la cultura. Marcia Farr en Ideologías de la alfabetización: prácticas locales y definiciones culturales en un estudio con rancheros en Chicago y Michoacán, señala la necesidad de significar de manera más amplia cómo la gente usa el lenguaje escrito; propone no sólo analizar las raíces sociales de las ideologías lingüísticas sobre alfabetización, sino también el modo en el que éstas transforman la realidad material.

La segunda sección aborda las perspectivas latinoamericanas de la cultura escrita y las matemáticas. Las autoras dan cuenta de las condiciones latinoamericanas en las que se intenta promover o realiza la producción de cultura escrita. Mercedes Niño Murcia en Prácticas letradas exuberantes en la periferia de la República de las letras, discute cómo la producción letrada, vernácula y autónoma de una comunidad andina no es necesariamente reconocida por "otros". Judith Kalman en San Antonio ¡me urge! Preguntas sin respuesta acerca de la especificidad de dominio de los géneros textuales y las prácticas letradas evidencia a través del análisis de las cartas escritas a San Antonio de Padua, las relaciones fluidas entre géneros, contextos y geografías simbólicas; plantea además la posibilidad y necesidad de las personas de movilizar y combinar discursos en diferentes contextos que no son fijos. Esto es relevante para el campo de la cultura escrita escolar en la cual los géneros han sido considerados como específicos y estables.

Las estigmatizaciones que hacen los medios o las políticas de alfabetización de adultos de los denominados analfabetos, así como la necesidad de incorporar dimensiones analíticas históricas y relacionales que nos permitan comprender de qué modo los individuos se apropian de la cultura escrita son temas que aborda Elisa Cragnolino en Condiciones sociales para la apropiación de la cultura escrita en familias campesinas. María del Carmen Lorenzatti en ¡¿Qué me empide a mí no saber leer y escribir?! Prácticas de cultura escrita en distintos espacios sociales explora las condiciones letradas complejas en las que se desenvuelve una mujer señalada como analfabeta. Gloria Hernández en Identidades juveniles y cultura escrita, analiza cómo los jóvenes usan la cultura escrita para participar en el mundo social, y cómo ésta incide en el proceso de construcción de sus identidades. Enfatiza la necesidad de que la escuela empiece a reconsiderar la noción de escritura rigurosa e ilustrada, para dar paso a prácticas de lectura y escritura vivas y vitales. Inge Sichra en Cultura escrita quechua en Bolivia: contradicción en los tiempos del poder, muestra cómo en un momento político favorable, la escritura en quechua se ha transformado en acción legislativa y política lingüística a través del castellano, lo que crea contradicciones que obstaculizan el desarrollo de la cultura escrita indígena.

Dos capítulos abordan la noción de numeracy o cultura matemática desde una perspectiva latinoamericana: ¿Del cálculo oral al cálculo escrito? Constataciones a partir de una situación de proporcionalidad por Alicia Ávila quien indaga cómo los trayectos escolares recorridos durante la educación básica de jóvenes y adultos influyen en la resolución de problemas de proporcionalidad en un contexto comercial. Irma Fuenlabrada y Ma. Fernanda del Prato en Prácticas matemáticas en organizaciones productivas de mujeres con baja escolaridad: construir una mirada que cimiente propuestas de enseñanza, realizan un análisis de los saberes matemáticos presentes en las interacciones de mujeres indígenas artesanas; argumentan que este tipo de análisis puede ser punto de partida para pensar en estrategias de enseñanza que instauren un nuevo conocimiento matemático al servicio de prácticas y lógicas comunitarias. Estos trabajos además de dar cuenta de la especificidad de las prácticas latinoamericanas de cultura escrita, así como los abordajes teóricos en construcción, relevan la importancia de resituar los saberes locales y las maneras en que aprende la gente. En todos los trabajos se cuestionan, en diferente grado, las distancias y cercanías entre contextos sociales como la escuela, el hogar o el trabajo.

La sección tres muestra las perspectivas internacionales de la cultura escrita y las matemáticas. Dave Baker en Usando la arena para contar su número: desarrollar la sensibilidad cultural y social de los maestros, sugiere que las matemáticas para los adultos pueden ser más incluyentes y eficaces; sustenta su propuesta en las matemáticas como prácticas sociales y los maestros como etnógrafos. Juliet McCaffery en Gitanos y viajantes: involucramiento con la autoridad, cultura escrita, discurso y práctica comunicativa, analiza prácticas comunicativas de gitanos ingleses y viajantes irlandeses; muestra cómo estas comunidades ahora usan recursos multimodales para influir en su entorno y así, redefinen su sentido de agencia, conservación cultural y autodeterminación. Elsie Rockwell en La escolarización del francés escrito da cuenta de cómo las tradiciones culturales de la sociedad francesa influyen en el manejo escolar de la escritura mediante el análisis de un aula en la cual niños y docente construyen relaciones semánticas y no solo instrumentales con los textos escritos. Ileana Seda en Prácticas alfabetizadoras ¿desde la escuela? analiza las contradicciones que surgen al implementar nuevos programas educativos que tratan de promover usos de lectura y escritura en la secundaria mexicana, pero que consideran escasamente los procesos de apropiación de los profesores de un nuevo enfoque. Virginia Zavala en ¿Quién está diciendo eso? Literacidad académica, identidad y poder en la educación superior, analiza los testimonios de Paula, estudiante quechuahablante de una maestría en antropología y muestra cómo la literacidad académica constituye un discurso construido históricamente con efectos ideológicos. Catherine Kell en Situar las prácticas: Nuevos estudios de Cultura Escrita y Estudios Etnográficos de Sudáfrica, analiza los movimientos de los significados a través de distintos contextos; desagrega las aportaciones que este tipo de análisis hace al concepto de prácticas de cultura escrita y relaciones de poder.

Este libro es una contribución pionera a la literatura latinoamericana relativa a los NLS; también releva la necesidad de abordajes metodológicos que permitan cuestionar procesos educativos complejos. Origina inquietudes como ¿Qué elementos o condiciones apoyan o restringen el desarrollo de prácticas de cultura escrita en las personas? ¿Qué cuenta como leer, escribir, hacer matemáticas para las instituciones y para los actores?

Los capítulos muestran claramente que la naturaleza social, relacional y situada de las culturas escritas y de la educación misma, requiere trabajo académico que nos permita pensar en estrategias para avanzar en la equidad de la distribución de prácticas sociales e incidir en políticas de alfabetización más incluyentes. Nos recuerda además, que la investigación, la gestión o la implementación de políticas ameritan estar basados en el diálogo real no con usuarios, sino con las personas, sus historias y contextos.

Notas

Data de recebimento: 01/07/2010

Data de aprovação: 21/07/2010

  • 1
    Centro de Cooperación Regional para la educación de Adultos en América Latina y el Caribe.
  • 2
    Sistemas de cordeles que registraban datos de asuntos públicos.
  • Endereço para correspondência:
    Laboratório de Educacion, Tecnologia y Sociedad
    DIE Cienvestav
    54832-800
    Ext. 1047
    México D.F.
  • Fechas de Publicación

    • Publicación en esta colección
      23 Set 2010
    • Fecha del número
      Ago 2010
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