Teniendo como telón el cuadro de la reforma psiquiátrica en Brasil, el presente artículo procura situar y diferenciar dos conceptos que considera menester para la transformación del modelo de manicomio de asistencia a la salud mental: deshospitalización y desinstitucionalización. Desde el ahondamiento de la discusión de estos conceptos, resalta la necesidad de la desinstitucionalización de la asistencia a la salud mental, abarcando tanto prácticas terapéuticas como el desmontado de los hospitales psiquiátricos. En propuesta pragmática, procura reposicionar el papel y la actuación de los agentes de la salud vinculados al hospital psiquiátrico, discutiendo la posibilidad de desinstitucionalización de sus prácticas terapéuticas por la proposición de un trabajo territorial. La estructuración y la aplicación práctica de ese trabajo pretenderían el montaje y el fortalecimiento de una red concisa de servicios y encaminamientos que podrían subvencionar la necesaria transformación del paradigma de la salud mental y auxiliar la implantación de los servicios sustitutivos, rescatando la deuda de la exclusión social contraída por la salud mental junto a la locura e invirtiendo en la inclusión social y en la ciudadanía de la población atendida en situación asilar. El hospital psiquiátrico, aún necesario para la garantía de la asistencia a la salud mental dado el actual cuadro brasileño de composición y estructuración de los servicios sustitutivos, se presenta aquí como catalizador de su propia reforma.
Rehabilitación psicosocial; Hospitales psiquiátricos; Salud mental; Reforma psiquiátrica