TRIBUTE
A LA MEMORIA DE PHILIP DAVIES MARSDEN
(07/01/1933 - 04/10/1997)
Esta nota pretende exaltar la memoria de un amigo que durante 23 años fué un consejero, colega universitario y principalmente, un filósofo de la ciencia y de la vida. En las muchas ocasiones en que compartimos juntos responsabilidades docentes y de investigación en el claustro de la Universidad de Brasília y, principalmente, en las diversas áreas endémicas de enfermedades parasitarias en Brasil, Philip fué el maestro universitario, en la difícil tarea de observar la naturaleza y la manifestación de sus fenómenos. Es mi intención recordar algunas facetas de su vida y obra, que constituyeron para mí y quizás, para otros amigos con quienes convivió, puntos impactantes de su personalidad humanística y científica y de su espíritu de intelectual desprendido.
Conocí a Philip, en 1974. Fuimos vecinos de sala de estudios en el recientemente formado Núcleo de Medicina Tropical y Nutrición de la Universidad de Brasília. En aquella época, él estaba viniendo de Bahia, donde había permanecido por algunos años etudiando la Enfermedad de Chagas en el recóncavo bahiano, conjuntamente con Michael Miles, Tobie Barrett y Donald Minter, de la London School of Hygiene and Tropical Medicine. Con la energía y entusiasmo que siempre lo caracterizaron, me convenció fácilmente para integrar un grupo de trabajo para el estudio de la Ecologia doméstica del Triatoma infestans. El conocía ya mucho de la biología de los triatominos vectores del Chagas, por su experiencia reciente de São Felipe, Castro Alves y otras áreas de Bahia. El resultado de su orientación en los estudios de campo de Goias, Bahia y Minas Gerais fué la publicación de una serie de trabajos cuya autoria fue del llamado "House demolition team" de la UNB!. Yo me acuerdo que algún tiempo después presentando estos trabajos en una reunión científica en el Perú, uno de mis colegas comentó entre los presentes: "ojalá, Cuba no vaya a demoler mi casa".
El citado grupo estaba constituido por: Nelson Junqueira de Alvarenga, hoy Investigador del Renê Rachou, FIOCRUZ, Belo Horizonte, MG; Carlos Henrique Costa, actualmente Profesor de Medicina Tropical en la Universidad de Piaui; Anthony J. Shelley, al presente entomólogo e investigador del British Museum of Natural History, Inglaterra y el autor de esta nota. Pienso que el tiempo, dedicación, dificuldades y especialmente, la convivencia que pasamos juntos, en la búsqueda de un objetivo común, contribuyó para que todos nosotros aquilatásemos la capacidad e inteligencia de Philip para dirigir un grupo de trabaljo científico. El resultado fué la natural y espontánea lideranza de nuestro amigo. Pienso que nunca dejó de serlo, para muchos de nosotros, que lo buscabamos en su sala para recibir consejos y discutir asuntos de temas de investigación de los más variados. El siempre tenia una opinión clara, precisa y objetiva. El leía todos los dias desde la 5 de la mañana!. Yo sabía, porque eramos vecinos en la supercuadra de Brasília. El tenía la gran cualidad de diseñar los protocólos, discutirlos con el equipo y principalmente, saber distribuir el trabajo. El era justo y perspicaz. El ahinco y fuerza que empleabamos en las tareas encomendadas eram reforzadas con su presencia en el trabajo, lado a lado con todos nosotros, dando el ejemplo, muchas veces sorprendiéndonos con su extraordinario dinamismo mental y físico.
Particularmente pienso que esto contribuyó para fortificar una época de muy activa investigación científica, en áreas endémicas del centro-oeste y nordeste brasileños. Siempre me dijo que eramos hombres de campo. Esto último seguramente en los planes de acción del Núcleo de Medicina Tropical. Philip tenia amplia experiencia en el asunto, obtenida en sus estudios de terreno realizados en Africa. Pero también los frutos surgieron en el ámbito de nuestros laboratorios de investigación. Una serie de trabajos experimentales con Dipetalogaster maximus fueron inspiración de Philip, que viajó especialmente a la Baja California, en Méjico, para colectar esta especie de triatomino. Es obvio que contaron con el entusiasmo de todos nosotros, pués él tenia la rara virtud de contagiar ese optimismo, necesario en el momento de la formulación de las hipótesis. Como siempre, el principio que normó su vida académica en relación a esto fue según sus propias palabras: "publicar, porque la palabra escrita se perenniza y vale más que la retórica".
Cuando em 1975 Air Colombo Barreto (Que en Paz descansa) se incorporó al equipo de investigación, surgió la idea de estudiar las leishmaniasis cutaneo-mucosas, escogiéndose una área en que la enfermedad fuese de importancia. Surge entonces en aquel período las primeras visitas científicas al sudeste de Bahia e inaguramos los estudios en la localidad llamada Três Braços (Ilha Formosa). Philip, Air y yo, establecimos el primer puesto de salud en ese pequeño poblado situado bien en el interior de la Mata Atlántica bahiana. Por esa Unidad de atención primaria de salud pasaron muchos estudiantes brasileños y extranjeros. Jóvenes estudiantes de las Facultades de Medicina de la Universidad de Cornell, de New York, USA y de la Universidad de Cambridge, Inglaterra aprendieron junto con nosotros el significado de la transmisión de varias de las enfermedades llamadas tropicales. Algunos de ellos siguieron el ejemplo médico-científico de Philip. Varias tesis de pos-graduación en Medicina Tropical fueron realizadas en esa localidad. Numerosos trabajos científicos, comunicaciones en Congresos nacionales e internacionales, revisiones y capítulos de libros fueron escritos como producto de las observaciones hechas en esa área endémica. Pienso que establecimos un verdadero local de entrenamiento en Medicina Tropical en el campo específico de la ecología e historia natural de las leishmaniasias tegumentares. Ahora el Puesto de Salud "Prof. Philip D. Marsden" existe en Três Braços, con actividad limitada, por los ya conocidos problemas crónicos de falta de recursos, para los estudios de esta naturaleza, en las diversas áreas endémicas que el Núcleo de Medicina Tropical y Nutrición de la Universidad de Brasília, sustenta.
Confieso que, nunca se trabajó tanto y con el máximo de entusiasmo, como en esa época de auge de los años del 75 hasta el 92 y, con los recursos económicos del National Institute of Health (NIH USA), del CNPq (PIDE V, VI) y WHO/SP/UNDP/TDR. Conforme acostumbrada a decir Philip, habiamos detectado la yugular del problema: investigar y definir Leishmania (Viannia) braziliensis. Ningún otro grupo de investigación tenía en la época la oportunidad de hacerlo. El estaba con la razón, más una vez. Pienso, modestamente que logramos contribuir substancialmente en el tema.
Creo que yo fuí uno de los privilegiados en la formación de mi vida académica-universitaria en Brasil. Philip fue el orientador de mi tesis doctoral. El tema, obviamente versó sobre Leishmania (Viannia) braziliensis en Três Braços, Bahia, Brasil. El me dijo que probablemente yo sería el primero y único Doctor por el orientado, en América. Lamentablemente, para otros que hubiesen aspirado a tener su orientación, esto fue verdad, él no consiguió formar otro doctor.
En los últimos años y como cosucuencia de un grave accidente automobilístico, Philip quedó imposibilitado de viajar a las áreas endémicas. Esto lo entristecía. Sin embargo, sus alumnos continuabam a hacerlo siempre bajo la orientación segura y objetiva del Profesor Felipe.
Con su espíritu siempre inquieto y por el hecho de sistemáticamente estar leyendo e investigando la literatura científica, planificamos e iniciamos algunos estudios relacionados con parásitos intestinales oportunistas en pacientes HIV+/Aidéticos. Su muerte llega cuando discutíamos, conjuntamente con Marco Tulio Garcia, los resultados preliminares de las casuísticas estudiadas retrospectiva y prospectivamente en nuestro laboratorio. La última vez que estuvimos juntos en mi laboratorio, él se sintió fastidiado por haber perdido su visión para poder definir con certeza la presencia microscópica de la espora, por ejemplo, de un Microscoporídio!. En realidad todos sabemos que es difícil hacerlo, pero él no se sintió satisfecho con mi justificación. Y comenzaba, más una vez, con los relatos interminables de su vida, como Parasitólogo, cuando era orientado por el Profesor P. C. Garnham, su maestro incomparable, en los laboratorios de la Escuela de Higiene y Medicina Tropical, en la época de sus estudios en Londres. Concluía diciendo, "César, los últimos discípulos de Garnham que restan somos Ralph Lainson y yo".
Compartí con él, muchos años de docencia impartida a nuestros alumnos de pos-graduación en Medicina Tropical. Fuimos responsables de la Protozoologia, Helmintos y Artópodos de interés médico. A su pedido, en mis actividades de pot-doctorado en Inglaterra, participé de muchas clases teóricas y práticas, seminarios, bien como, estudié la organización académica del departmento de Parasitologia Médica de la London School of Hygiene and Tropical Medicine. Su idea era que algún día pudiésemos organizar un curso de Parasitología Médica en los moldes de su Escuela, a la cual él tanto amaba.
A pesar de su deficiencia física, de la cual se quejaba con amargura, continuó su ferviente actividad universitaria debido a su gran fuerza de caracter y de voluntad. La muerte de Philip Marsden priva pués, a la Medicina Tropical y a la ciencia médica de uno de sus más destacados y productivos líderes. Será tarea de sus colaboradores y discípulos mantener vivo y vigent el espíritu de Profesor y científico que Philip irradió en el seno del Núcleo de Medicina Tropical y Nutrición de la Universidad de Brasília. Conociéndolo más de 23 años, habiendo con el convivido, en la vida académica y en la cotidiana, al recordarlo con nostalgia, pienso que no murió y para muchos de nosotros, se transformó en un símbolo y un ejemplo a ser seguido.
Prof. Dr. César A. Cuba Cuba
Professor Titular de Parasitologia Médica
Investigador del Núcleo de Medicina Tropical de
la Universidad de Brasília y del CNPq, Brasil.
Publication Dates
-
Publication in this collection
04 Feb 1999 -
Date of issue
Sept 1997
